El extremo argentino Ezequiel Lavezzi lamentó perder dos finales en menos de un año (Mundial y Copa América), y señaló que esta derrota les ha dolido porque esta era una buena oportunidad para que la selección pudiera levantar una Copa."Otra vez nos hemos quedado con un sabor amargo", admitió Lavezzi, quien entró al terreno de juego a la media hora de partido para sustituir al lesionado Ángel di María.
También se pronunció sobre su compañero Lionel Messi y pronóstico que es seguro que en algún momento conseguirá ganar algo con la selección de su país.