Miguel Rivera, técnico del filial del Almería (Segunda B) que esta jornada dirigirá al primer equipo tras la destitución de Sergi Barjuan, ha afirmado hoy que en el estadio Motilivi ante el Girona deben recuperar la "confianza" y la autoestima" para volver a la senda de los buenos resultados.El técnico malagueño, en la conferencia de prensa previa a la disputa de este partido, fijado para el próximo domingo, ha comentado que actualmente el equipo, situado en puestos de descenso tras haber sumado un punto en los últimos cuatro partidos, tiene delante una "muralla psicológica" que "se ha ido levantando al no llegar los resultados".
Miguel Rivera afirmaba que en esta semana han trabajado mucho en el aspecto de recobrar la confianza y que ha "visto muchísimo compromiso, muchísima profesionalidad y sobre todo un querer cambiar esta dinámica desde el trabajo".
El preparador, sobre la visita al Girona, otro equipo que partía al principio de la temporada con el objetivo de estar en la zona alta pero que con ocho puntos, uno más que el Almería, está también mal clasificado, ha relatado que deben corregir "los parámetros defensivos en el sentido colectivo".
"Cada uno tiene que tratar de implicarse un poco más en el sentido de entender qué es más necesario en la situación que estamos, y exprimirse más cuando no tengamos el balón, porque es entonces cuando estamos más desordenados", ha argumentado.
Miguel Rivera ha apuntado sobre el conjunto gerundense que "juega un 3-5-2 con carrileros muy abiertos, cuenta con un futbolista que ha sorprendido, como Pere Pons, extraordinario, y en general tiene todas las ideas del fútbol muy bien trabajadas".
"Además, provoca partidos muy locos de continuas idas y venidas. Por eso, hemos hecho tanto hincapié a las transiciones de ataque y defensa", ha añadido.
El malagueño ha destacado que en el Almería tienen que sacar de las "cabezas todo lo negativo y establecer sensaciones positivas que son muy necesarias para empezar a cambiar".