KPMG deja de ser la auditora de FIFA dentro del proceso de reformas de ésta
La FIFA ha reconocido que la decisión de KPMG de dejar de ser su auditora después de una década de servicios le otorga la oportunidad de trabajar con una nueva firma, que se concretará próximamente, dentro del proceso de reformas que acomete la organización, también en su funcionamiento financiero.En un comunicado, la FIFA ha dado "la bienvenida a este cambio" y ha asegurado que ante las acusaciones de las autoridades suizas y estadounidenses sobre transacciones financieras, es esencial que se revise externamente y se reforme completamente la función financiera de la FIFA".
"El nombramiento de un nuevo auditor, junto a los de un nuevo responsable financiero y de conformidad son pasos esenciales en este proceso", ha añadido el organismo que preside desde el pasado 26 de febrero el suizo Gianni Infantino.
La FIFA ha estimado que el acuerdo con la nueva auditora se concretará pronto, por acuerdo inicial del Consejo de la FIFA que después se hará oficial en el Congreso del año que viene, de acuerdo a los Estatutos.
El pasado 14 de mayo, tras el último Congreso de la organización celebrado en México, el presidente de la Comisión de Auditoría y Conformidad, Domenico Scala, presentó su dimisión en disconformidad con la aprobación de una resolución que otorga al Consejo de la FIFA la competencia para nombrar o destituir a miembros de sus órganos independientes, como comités de ética o auditoría que él presidía.
La medida aprobada en México concede al Consejo, que es el órgano que ha reemplazado al Comité Ejecutivo y que es dirigido por el presidente Gianni Infantino, el derecho a cambiar a los responsables de la cámaras de investigación y resolución de la Comisión de Ética, Hans-Joachim Eckert y Cornel Borbely, así como al propio Scala si siguiera en el cargo.
En opinión de Scala, esta decisión permite al Consejo -órgano que ha reemplazado al Comité Ejecutivo- impedir investigaciones contra miembros individuales en cualquier momento".
Tras la renuncia de Scala, la FIFA lamentó que éste hubiera "malinterpretado el propósito de la decisión tomada por el Congreso (...), que fue tomada para que el Consejo pueda designar a los miembros de forma provisional a las plazas vacantes de los nuevos comités, para que puedan empezar a cumplir su papel como parte del proceso de reforma en curso hasta el próximo Congreso de la FIFA en 2017".
También entonces la FIFA precisó que "la medida permite la eliminación rápida de los miembros que han incumplido sus obligaciones" y reiteró su "respeto plenamente a la independencia de la Comisión de Auditoría, Ética y Conformidad".