Sebastián Blanco cada día está más identificado con fútbol ganador de Timbers

El centrocampista argentino Sebastián Blanco vive su primera temporada en la competición de la Liga Profesional de Fútbol de Estados Unidos (MLS) y cada día está más identificado con el estilo de juego ganador de los Timbers de Portland."Me he adaptado muy bien desde que llegué, todo han sido progresos", declaró Blanco a la Agencia EFE, que dejó el fútbol argentino por la experiencia de la MLS. "La verdad que los Timbers tienen un estilo lindo, que trata de jugar siempre por el suelo, que mantiene el duelo permanente de los delanteros con los defensores".
Blanco reconoció que se trataba de un fútbol pleno con el que estaba identificado, pero a la vez era algo que exigía esfuerzo permanente.
"Obviamente, que ha que trabajar bastante porque muchas veces es físico y hay que continuar marcando a los laterales porque todos los equipos son profundos, y bueno hay que colaborar, pero la verdad que estoy contento porque es un equipo que intenta jugar siempre", subrayó Blanco, que antes de llegar a la MLS jugó con el San Lorenzo de Almagro. "Creo que podemos llegar lejos".
La presencia de su compatriota Diego Valeri como líder indiscutible de los Timbers fue un factor clave a la hora de decidir la llegada a Portland y también lo positivo de su adaptación.
"Hemos jugado desde chicos en Argentina, logramos también juntos un campeonato y nos conocemos a la perfección lo que hace que todo sea muy positivo, además que también hay otros jugadores de clase dentro del equipo como Darlington Nagbe que uno sabe que siempre puedes entregarles el balón y responder de manera perfecta".
Blanco admitió que jugadores como Valeri y Nagbe le dan al equipo una gran tranquilidad en todo momento que el balón pasa por su control y a medida que avanza la temporada son cada vez más fuertes y competitivos.
La integración deportiva dentro del equipo también tiene como complemento especial el hecho de su equilibrio personal, ahora que dentro de un mes va a ser padre de una niña, algo que le llena de felicidad y la exterioriza en el campo cada vez que marca un gol.
"Me llena de alegría el poder dedicarle los goles a mi hija que va a nacer y por supuesto a mi mujer, que tanto me ayuda", destacó Blanco. "Es un momento importante en mi carrera y en mi vida".
En cuanto a su experiencia dentro de la MLS, lo más importante para Blanco ha sido todo el proceso de encajar al máximo en el esquema del equipo su estilo de juego de tratar bien el balón, buscar siempre el gol y también encontrar al compañero mejor colocado para rematar.
"Ya pasó el momento de sentir la diferencia del fútbol argentino del que llegaba, pero en los siete u ocho últimos partidos ya me sentí mucho mejor, con gol, también asistiendo, y bueno de a poco sintiéndome cada día mejor".
La pregunta obligatoria que se le tiene que hacer a todos los profesionales que llegan de ligas mucho más competitivas que la de la MLS, es como la ven, y Blanco se une a la mayoría de los extranjeros que consideran que es bueno.
"La verdad que muy bueno", valoró Blanco. "Siempre digo que se le subestima demasiado, especialmente porque es una liga en crecimiento, pero que todos los equipos tienen tres o cuatro jugadores de primer nivel y que cada día competir sea más difícil".
Blanco explicó que esa igualdad y buen nivel genera que nunca se sepa que es lo que va a pasar en un partido.
"Pero lo que está claro es que a nivel de organización y estructura se encuentran a un gran nivel", subrayó Blanco.
Sin embargo, admitió que al no haber el sistema que rige en el resto de las ligas del mundo de los ascensos y descensos al concluir cada temporada, le resta presión durante la competición.
"Nosotros hemos nacido con eso, prácticamente", admitió Blanco. "Creo que lo que produce a los equipos es un poco más de presión, dado que hoy la única que tienen, aunque importante, es la de entrar en los playoffs y salir campeón, mientras que la posibilidad de un descenso, eso implica a los equipos tomar menos riesgos o quizás jugar más a no perder".
Blanco señaló que al final serán los directivos los que tengan que decidir al respecto y que sería un cambio en la manera como juegan los equipos, pero su misión es la jugar cada día mejor con los Timbers, sin importar el sistema que haya de competición.