María Vargas acaba de terminar el Bachillerato en la rama de Ciencias y quiere estudiar Biología, pero no tiene claro si quiere ser bióloga o medio centro porque su pasión es el balón y ahora, gracias a una beca, se muda de Málaga a Estados Unidos para cumplir su sueño de estudiar biología mientras entrena en un equipo de fútbol femenino.
A pesar de su timidez, se desenvuelve a la perfección en el idioma anglosajón y para ser aceptada en el Nyack College -Institución privada que la ha fichado para compatibilizar sus estudios y su carrera deportiva-ha tenido que pasar con solvencia dos exámenes de inglés además de tener un gran currículo académico.
"Será una buena experiencia y una aventura que me servirá para el futuro, me voy al estado de Nueva York, a un pueblo que está a una hora y media en metro de Manhattan y podré estudiar como un alumno cualquiera de allí, pero al tratarse de una beca pues una parte de la manutención está pagada", asegura esta joven desde el patio de su colegio, El Pinar, en Alhaurín De la Torre (Málaga).
Nacida en Jerez y criada en la Costa del Sol, María ha jugado siempre al fútbol en el colegio, se ejercitó en el campo del Lauro, pasó al Atlético Estación y, acabó recalando en el Málaga CF Femenino Filial, que este año militará en la Segunda División Nacional Femenina.
"Yo no pensaba acabar en Estados Unidos; he hecho mil deportes: natación, fútbol, tenis, pero el fútbol es el deporte que siempre más me ha gustado", afirma y no duda en que la clave para estudiar en Estados Unidos va a ser la organización y disfrutar.
En el Nyack College jugará en el equipo de la universidad y entrenará dos veces al día mientras se prepara la carrera y es consciente de que es una afortunada que está viviendo el buen momento que vive el fútbol femenino.
"Está avanzando, se ve y se nota que cada vez se habla más en las redes sociales, lo echan por la tele, veo más chicas que cuando yo empecé; ahora veo a un montón de niñas jugando y me refieran a mí ", dice con la vista puesta en el pasado cuando era la única niña del colegio que jugaba en el recreo junto a los niños.
Fue su profesor de Educación Física el que la alentó para iniciar esta aventura y su madre no confiaba en que quisiera irse, ahora está haciendo las maletas para despedirse de España durante, al menos, un año, aunque su intención es terminar los cuatro años de estudios en América.
Antes de despedirse de el colegio El Pinar tiene un mensaje para todas las alumnas más jóvenes del centro: "Que no tengan vergüenza y que hagan lo que ellas sientan; si quieren jugar al fútbol, pues que jueguen al fútbol".