La ceremonia de los premios 'The Best' de la FIFA dio comienzo este lunes a las 19:30 hora local (18:30 GMT) en el 'Royal Festival Hall' de la capital británica sin la presencia ni de Cristiano Ronaldo ni de Leo Messi.
La gala dará a conocer al ganador del premio a mejor jugador que se disputan el portugués Cristiano Ronaldo, vencedor en las dos anteriores ediciones, el croata Luka Modric y el egipcio Mohamed Salah.
Con Salah y Modric, que apareció acompañado de su mujer y sus dos hijos, ya acomodados en sus asientos en el auditorio próximo al río Támesis, el gran ausente de la velada es Cristiano, quien debido a sus compromisos con el Juventus de Turín decidió no acudir a la gala, tras no estar tampoco en la ceremonia de la UEFA en Montecarlo.
Tampoco estuvo Messi, quien, tras empatar este domingo con el Girona en la liga española, alegó motivos familiares y no se presentó en la ciudad inglesa.
Pese a que el astro luso ganó con autoridad el premio en 2016 y 2017, este año la pugna está muy igualada y a minutos de la entrega es complicado discernir quién tiene mejores argumentos para levantar el trofeo.
Cristiano ganó su quinta Liga de Campeones, tercera consecutiva con el Real Madrid, siendo el máximo goleador de la competición con 15 tantos.
Modric, por su parte, fue pieza clave en las alineaciones de Zinedine Zidane y también levantó la tercera 'orejona' consecutiva, cuarta en su palmarés particular.
La diferencia la puede marcar el Mundial de Rusia en el que Cristiano, pese a un arranque fulgurante con tres goles ante España, se diluyó y acabó eliminado con su selección, Portugal, en octavos de final.
La actuación de Modric sí fue brillante y guió a Croacia a la primera final de su historia, en la que cayó con Francia. El balón de oro del torneo fue galardonado hace menos de un mes con el premio a mejor jugador de la UEFA; un argumento más para apostar por el triunfo del '10' blanco.
En un segundo plano queda Mohamed Salah, al que la ausencia de títulos le resta posibilidades pese a su espectacular campaña en la Premier League, donde anotó 32 goles marcando un nuevo récord en la competición.
La ceremonia será dirigida, como el año pasado, por el carismático actor Idris Elba, con el acompañamiento de la periodista francesa Anne-Laure Bonnet.
Durante el acto, que tendrá una duración aproximada de una hora y media, se entregarán siete premios más además del de mejor jugador.
En categoría femenina, la noruega Ada Hegerberg (Olympique de Lyon), la alemana Dzsenifer Marozsan (Olympique de Lyon) y la brasileña Marta Vieira (Orlando Pride) se disputarán el premio a mejor jugadora.
El galardón de mejor portero recaerá en Thibaut Courtois, del Real Madrid, Hugo Lloris, del Tottenham Hotspur o Kasper Schmeichel, del Leicester City.
Didier Deschamps se postula como claro favorito a suceder en el palmarés a Zinedine Zidane, también nominado, en el entorchado a mejor entrenador. Zlatko Dalic es el tercero en la pugna, mientras que en el premio a mejor entrenador de fútbol femenino, los candidatos son Reynald Pedros (Olympique de Lyon), Asako Takarura (Japón) y Sarina Wiegman (Países Bajos).
Además, la FIFA también premiará a la mejor afición de la temporada; condecoración a la que optan Perú, Japón, Senegal y el hincha chileno Sebastián Carrera, que se recorrió 1.500 kilómetros para ver solo en la grada a su equipo el Deportes de Puerto Montt.
En el mejor gol de la temporada, o premio Puskas los grandes favoritos son Cristiano y Bale con las chilenas a Juventus y Liverpool, respectivamente, Messi, con su gol a Nigeria en Rusia, y Riley McGree, del Melbourne City, con un golazo de tacón.
Por último, el máximo organismo del fútbol mundial entregará el premio al juego limpio.