El futbolista Diego Souza, del Sao Paulo, rindió hoy homenaje al presidente electo de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, durante la celebración de un gol en el encuentro frente al Flamengo de la trigésimo segunda jornada del Campeonato Brasileño.
Tras abrir el marcador, Souza hizo un saludo militar ante las cámaras de televisión y repitió el símbolo del arma, una de las principales señas de identidad de Bolsonaro.
"Cada uno tiene su opinión en términos de política. Respeto a todo el mundo, espero que respeten la mía", afirmó el futbolista, autor de primer gol del partido, que terminó con un empate 2-2 en el estadio Morumbi.
El Sao Paulo, cuarto clasificado en la liga brasileña, dijo a través de su asesoría que la "manifestación del atleta no representa la posición de la institución".
El pasado septiembre, antes de la celebración de las elecciones, Felipe Melo, jugador del Palmeiras, dedicó un gol a Bolsonaro durante el encuentro frente al Bahía, que concluyó con un empate 1-1.
El apoyo de Melo al ultraderechista generó una intensa polémica en las redes sociales entre seguidores y detractores del candidato y capitán en la reserva del Ejército, y terminó involucrando al Palmeiras como institución, ya que algunos aficionados exigieron que el jugador fuera sancionado.
"El Palmeiras respeta cualquier posición política de sus atletas, empleados y colaboradores, y ratifica su neutralidad en asuntos políticos, partidarios, religiosos o cualquier otra forma de manifestación personal", señaló el club entonces en un escueto comunicado.
Por otro lado, el Atlético Paranaense fue multado por el Tribunal Superior de Justicia Deportiva después de que los jugadores del equipo saltasen al campo con una camiseta amarilla con la frase "Vamos todos juntos por amor a Brasil", antes del partido de liga contra el América Mineiro.
Lo hicieron apenas un día antes de la primera vuelta de los comicios del 7 de octubre y emplearon un lema similar al comúnmente utilizado por los aliados de Bolsonaro.
El ultraderechista venció las elecciones el pasado 28 de octubre con un 55 % de los votos, frente al 44 % que obtuvo el progresista Fernando Haddad, y asumirá la Presidencia de Brasil a partir del 1 de enero del próximo año.