Se para Argentina. Se para Sudamérica. Se para el mundo. El Monumental se convierte este sábado en el epicentro del mundo del fútbol. Allí se va a decidir el campeón de la Copa Libertadores 2018 en un partido de vuelta emocionante e impredecible a partes iguales. River Plate y Boca Juniors buscan la gloria tras el empate a dos de la ida en La Bombonera, sabiendo que los goles como visitante no valen doble y que el que salga perdedor cargará con esa cruz durante años.
En el plano futbolístico existen algunas dudas en cuanto a los protagonistas que empezarán el Superclásico. Si bien Marcelo Gallardo recupera a Leonardo Ponzio, pieza clave en su esquema y vital para el técnico de Merlo, también pierde por sanción a Santos Borré y por lesión a Nacho Scocco. Así, con el ataque muy mermado, todo apunta a que Gallardo reforzará el medio para dejar sólo a Pratto en ataque, siendo Juan Fernando Quintero el sustituto de Borré en el once.
Montiel, Maidana, Pinola y Casco parecen ser fijos en defensa, mientras que Enzo Pérez, ‘Piti’ Martínez y Palacios acompañarán a Ponzio en el medio. Habrá muchos focos, de nuevo, puestos en el joven Exequiel Palacios, que parece tener un futuro cercano lejos de Buenos Aires. En la portería, Armani, que protagonizó alguna parada de mérito en la ida, seguirá defendiendo el marco.
En el ‘Xeneize’ también hay dudas. Guillermo Barros Schelotto, al igual que Marcelo, usará un once que posee una base. Jugadores como Izquierdoz, Magallán, Barrios, Nández o Abila son fijos. Las incógnitas empiezan en la portería. Rossi fue el arquero de la ida, pero Andrada ya está recuperado (jugó ante Patronato el pasado fin de semana). El primero lo hizo bien ante River, pero el segundo tiene más peso.
También habrá que esperar para ver si Jara ocupará el lateral derecho (que parece lo más probable) o veremos ahí a Buffarini. Y para saber el ocupante de la última pieza que está en el aire. Almendra, Pavón (que tuvo que retirarse lesionado ante River) o Carlos Tévez son los aspirantes.
La importancia de esta final de la Copa Libertadores va más allá de un resultado. Su significado se refleja en un estadio lleno para un entrenamiento: 60.000 personas abarrotaron La Bombonera para empujar a los suyos en la previa del partido. Pasión desbordada. No es una final cualquiera y eso se nota.
El desarrollo del partido es todo un misterio que se desvelará en su momento, pero lo que sí es real e incuestionable es que estamos ante uno de los partidos más importantes de la historia. Un duelo que quedará en la memoria, para bien o para mal, de todos. Una batalla grandiosa que sólo puede tener un ganador en la Copa Libertadores: River o Boca.
: Armani; Montiel, Maidana, Pinola, Casco; Ponzio, Enzo Pérez, Palacios, Martínez, Quintero; Pratto.
: Andrada; Jara, Izquierdoz, Magallán, Olaza; Barrios, Nández, Pablo Pérez; Villa, Tévez y Abila.
Andrés Cunha (URU)