Buenos Aires, 24 nov (EFE).- El capitán de Boca Juniors, Pablo Pérez, quien sufrió una lesión en el ojo tras la agresión de los hinchas de River Plate, dijo que la final de la Copa Libertadores de este sábado "tenía que ser una fiesta" pero que en cambio "parecía" una "guerra".,"Esto tenía que ser una fiesta y parecía que veníamos a la guerra", dijo escuetamente Pérez al retirarse del estadio Monumental a la prensa local,Mientras caminaba rumbo al autobús aseguró tener "lastimado" el ojo por uno
Buenos Aires, 24 nov .- El capitán de Boca Juniors, Pablo Pérez, quien sufrió una lesión en el ojo tras la agresión de los hinchas de River Plate, dijo que la final de la Copa Libertadores de este sábado "tenía que ser una fiesta" pero que en cambio "parecía" una "guerra".
"Esto tenía que ser una fiesta y parecía que veníamos a la guerra", dijo escuetamente Pérez al retirarse del estadio Monumental a la prensa local
Mientras caminaba rumbo al autobús aseguró tener "lastimado" el ojo por unos vidrios.
Sin embargo, dijo sentirse "bien".
El autobús en de los jugadores de Boca Juniors fue atacado por hinchas locales, que rompieron los vidrios con piedras y botellas.
La policía lanzó gas lacrimógeno y eso afectó a los jugadores.
El partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors que debía jugarse esta tarde se pasó para mañana domingo a las 17.00 horas (20.00 GMT).