Los veteranos de LaLiga demuestran que la edad no es obstáculo para rendir al máximo y el último ejemplo es Jorge Molina, que con 37 años marcó ante el Girona su decimocuarto tanto, que le coloca como máximo goleador del Getafe, junto a Jaime Mata, y es una de las sensaciones de la campaña.
Jorge Molina es uno de los artífices de al histórica temporada del Getafe que podría verse culminada con una clasificación para la Liga de Campeones. Ya tiene segura su vuelta a los torneos europeos.
El delantero cuenta con una dilatada carrera deportiva en al que ha pasado por el Alcoyano, el Benidorm, el Gandía, el Poli Ejido el Elche y el Betis, con el que debutó en Primera y donde permaneció seis temporadas, aunque su mayor número de tantos lo firmó ya en el Getafe en al temporada 2016-17, cuando hizo 22 tantos en 44 partidos, una media de 0,5 goles por encuentro en Segunda División.
En el Coliseum Alfonso Pérez aporta su experiencia y calidad a una línea delantera de moda que completan Mata, que esta campaña ha alcanzado la internacionalidad, y el propio Ángel Rodríguez.
Molina es un ejemplo notable del capítulo de veteranos de LaLiga en el que sobresale también Aritz Aduriz, el delantero del Athletic de 38 años que si bien no ha tenido una buena temporada a causa de sus problemas físicos -sólo ha marcado seis goles-, es uno de los máximos goleadores históricos del club.
Aduriz ha anotado 148 goles en 294 partidos en los últimos siete años con el Athletic, a los que hay que sumar otros 23 en 90 partidos en su primera etapa con 'Los Leones' en todas las competiciones.
Otro de los veteranos artilleros de LaLiga esta temporada es el delantero del Eibar Charles Dias, que tiene 35 años y con 14 goles, al igual que Jorge Molina, es el máximo goleador del conjunto armero. Tan solo les supera, a nivel nacional, Iago Aspas, delantero del Celta, con 17 dianas, y el espanyolista Borja Iglesias, con 15.
Javi Guerra, que ya tiene 37 años, ha tardado en encontrar protagonismo esta campaña en el Rayo Vallecano. Ha tenido que volver Paco Jémez al banquillo franjirrojo para recobrar la titularidad que no tuvo a lo largo del curso.
Incluso fue un jugador importante sobre todo en el partido frente al Real Madrid, en el que aprovechó la baja de Raúl de Tomás por la llamada "cláusula del miedo".
El ariete franjirrojo, que aún no ha marcado esta temporada, jugó los noventa minutos del choque en el que fue la gran referencia en ataque de su equipo y el gol de la victoria llegó tras un penalti cometido por Jesús Vallejo que provocó él. En cambio, el Rayo no ha podido evitar el descenso.
Pero para que los delanteros marquen más goles es necesario que haya buenos jugadores en el centro del campo que den asistencias. Uno de los mejores en ese apartado es también un veterano ilustre, Santi Cazorla, cuya calidad indudable ha vuelto a quedar demostrada en su regreso a España y a los terrenos de juego tras muchos meses de baja como jugador del Arsenal.
Cazorla, campeón europeo con la selección nacional, ha brillado con luz propia en el Villarreal y en toda la Liga. Con sus 34 años es el tercer máximo asistente del torneo con diez pases de gol en sus 44 partidos, en los que ha marcado tres goles.
Otro gran pasador, desde la banda o desde la media punta, es el portuense Joaquín Sánchez, que tiene 37 años y busca el récord de partidos en Primera.
El del Puerto de Santa María ha jugado 517 partidos en la máxima categoría sumando los jugados en el Betis, el Valencia y el Málaga, y con esa cifra ha superado ya a históricos como Miquel Soler, que jugó 504; Xavi Hernández, que participó en 505, Iker Casillas, con 510 y su próximo objetivo es Manuel Sanchís, que llegó a los 523.
Más lejos están Paco Buyo, con 542 partidos; Eusebio Sacristán, que suma 543; Raúl González, 550, y Andoni Zubizarreta, líder del ránking con 622 encuentros en Primera.
Al fino futbolista andaluz no le ha correspondido el devenir de su equipo, que no ha alcanzado los objetivos marcados. Sin embargo, ha demostrado que pese a su edad su categoría futbolística sigue vigente, ya sea en la medular o incluso de lateral, como le ha situado en determinados encuentros Quique Setién.
Y en el apartado defensivo, uno de los más veteranos de LaLiga es el defensa del Villarreal Daniele Bonera, que también tiene 37 años, pero que no ha disfrutado de una temporada sencilla, pues solo ha jugado once partidos, repartidos entre tres de Liga Europa, otros tres de Copa del Rey y cinco de liga.
En lo referente a porteros, uno de los más longevos de LaLiga es el guardameta del Espanyol Diego López, que regresó a España tras un breve paso por el Milan y que no lo tuvo nada fácil la pasada temporada en la que Pau López le ganó la partida.
De hecho, el meta gallego, de 37 años, pasó de jugar 35 partidos en su primer año como 'perico' a sólo 15 en el segundo, pero esta temporada, y ayudado por la marcha de Pau López al Betis, el que fuera portero del Real Madrid, Villarreal, Sevilla, ha vuelto a ser indiscutible con 36 partidos jugados y 50 goles en contra.
Si siguen a este ritmo cualquiera de estos veteranos podría seguir jugando a las edades a las que se retiraron jugadores como como Juan Carlos Valerón, que lo hizo a los 41 años, la misma edad a la que lo dejaron Amedeo Carboni y Ricardo López, o a los 40 como en el caso de Donato y César Sánchez, aunque el récord absoluto de veteranía lo tiene el británico Harry Lowe, que jugó un partido de Primera con la Real Sociedad ante el Valencia con 48 años.