La mujer que trató de vender dos entradas falsas de la final de la Liga de Campones por 8.400 euros probablemente no sabía que, por buenas que pareciesen, la Policía Municipal de Madrid iba a tardar sólo unos minutos en comprobar que eran "falsas de toda falsedad", gracias a su sección de Documentoscopia.
Fueron agentes municipales los que detuvieron ayer por la tarde a una mujer venezolana, de 32 años, que aprovechó que dos hombres que se paseaban cerca de la Puerta del Sol con un cartel del tipo 'Compro entradas para la Champions' para ofrecerles dos por un módico precio: 4.200 euros cada una.
Fuentes de la Policía Municipal han detallado a Efe que aunque las entradas parecían "buenas", algo hizo que los dos amigos rumanos que las codiciaban sospecharan de la mujer, por lo que se dirigieron a unos agentes que estaban a escasos metros de ese sitio, en el comienzo de la calle del Carmen, como parte del operativo desplegado con motivo del partido.
Se trataba de agentes de la Unidad de Apoyo a la Seguridad, encargada de la vigilancia en eventos con mucha afluencia de personas, que en pocos minutos trasladaron las entradas sospechosas a la sección de Documentoscopia de la Policía Judicial del Cuerpo, que poco después emitió el informe que es preceptivo para argumentar una denuncia por estafa.
Esos expertos, que cuentan con equipos de última generación, determinaron que la perforación láser de las entradas era de imitación, que las líneas de precorte eran irregulares y que el sistema de impresión láser no era el adecuado para ese tipo de documento.
Así a la mujer se le comunicó que quedaba detenida por un presunto delito de estafa, se hicieron los trámites correspondientes y fue puesta a disposición de la Policía Nacional, como es preceptivo, antes de las doce de la noche, según las fuentes.
Un problema que hay con las entradas de la final que disputarán esta noche en el Wanda Metropolitano el Liverpool y el Tottenham es que no son nominales, de manera que es posible revenderlas hasta el último minuto, motivo por el que la Policía Municipal y la Policía Nacional siguen en alerta ante posibles fraudes.
Si las falsificaciones son muy burdas y se puede apreciar claramente el engaño no se detiene por delito de estafa, según las fuentes, que detallan que en los últimos días han intervenido algunas entradas de este tipo y se ha investigado a varias personas por ello. La mayoría eran simplemente fotocopias a color.
De los 1.300 policías municipales que forman parte del dispositivo de seguridad del partido, cincuenta son especialistas en falsificaciones, tanto de entradas como de productos relacionados con el encuentro, que trabajan en colaboración con la UEFA.