Andrea Montolivo
Udine (Italia), 29 jun .- Luis De La Fuente, seleccionador de España sub-21, se prepara para dirigir este domingo a su equipo en la final del Europeo de categoría contra Alemania, a un solo paso de un éxito que le permitiría cerrar el círculo junto a una generación de jugadores con los que ya se coronó en el campeonato europeo sub-19 de 2015.
De La Fuente (Haro, 21 de junio de 1961) estaba en el banquillo el 19 de julio de 2015, cuando la Roja sub-19 ganaba 2-0 a Rusia en Katerini (Grecia) y conquistaba su séptimo título de categoría, y tomó el mando del seleccionado sub-21 en 2018, reencontrándose con muchos de "sus" jugadores.
Nueve de los 23 futbolistas que citó el técnico de Haro para el presente Europeo presumen de medalla de campeones europeos sub-19 de 2015: Unai Simón, Antonio Sivera, Jesús Vallejo, Jorge Meré, Aarón Martín, Dani Ceballos, Mikel Merino, Alfonso Pedraza y Borja Mayoral.
De La Fuente les conoce perfectamente y juntó a ellos futbolistas coetáneos que se han afirmado en los años siguientes para plasmar a una selección que fue finalista en el torneo continental sub-21 de 2017 y que puede vengarse de esa derrota con Alemania este domingo en la Dacia Arena de Udine.
El resultado es un equipo que sigue fiel al estilo marcado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y que, pese a ser muy joven, presume de una identidad y de una seguridad en el juego que le convierten en un referente europeo.
Es el resultado de un brillante trabajo realizado con estos jugadores primero por Albert Celades, que estuvo en el banquillo en el Europeo de 2017, y luego por De La Fuente.
"Unión", "confianza", "compromiso" son las palabras más usadas para definir a este equipo desde el comienzo del torneo tanto por el seleccionador como por los jugadores, que sienten la camiseta como una segunda piel.
"La fortaleza de este equipo es que, además de ser gestor del balón, defensivamente es disciplinado, sacrificado. No somos infalibles, pero nos sentimos cada día con más confianza. Estos jugadores todavía no han tocado el techo", subrayó De La Fuente tras la goleada a Francia en semifinales.
"Este equipo crece, supera adversidades, trabaja con compromiso para alcanzar su objetivo. Está acostumbrado a luchar, no se le ha regalado nada. Da gusto trabajar con gente de este nivel, me siento un privilegiado", insistió.
Llega con entusiasmo España a la cita de la Dacia Arena y en su mejor estado de forma.
El 4-1-4-1 dibujado en los últimos dos partidos por De La Fuente, con Mikel Oyarzabal de falso nueve delante de una línea de tres cuartos formada por Pablo Fornals, Dani Ceballos, Fabián Ruiz y Dani Olmo dio imprevisibilidad al juego español y el resultado fue contundente: nueve goles en dos duelos, ambos decisivos, contra Polonia y Francia.
Un planteamiento que da alegrías a España y que garantiza además una solución extra-ofensiva desde el banquillo, con un Borja Mayoral que lleva dos partidos consecutivos entrando y marcando.
Volverá a apostar por este esquema De La Fuente para saltar al campo en la final contra Alemania, en un partido que puede darle al seleccionador y a un grupo de futbolistas históricos la venganza por el revés de 2017 y la guinda a un largo camino.