Una multitud en fiesta recibió este lunes al lateral derecho Dani Alves en la ciudad brasileña de Sao Paulo, en donde el histórico jugador de la Canarinha y exfutbolista de clubes como Barcelona y PSG será presentado el martes como nuevo refuerzo del club Sao Paulo.
Centenares de hinchas esperaron al jugador en la tarde de este lunes en el aeropuerto de Congonhas y, como si se tratara de un ídolo de rock, lo recibieron con una fiesta que impidió que Alves, que hasta la víspera estaba pasando vacaciones en la ciudad de Fortaleza, pudiera abandonar con facilidad la terminal aérea.
Alves, que vestirá la camisa número 10 del Sao Paulo y será el jugador con mayor salario en la actual Liga brasileña, tuvo que contar con la ayuda de agentes de seguridad para abandonar Congonhas ante la presión de cientos de hinchas que agitaban banderas y llegaron a usar fuegos de artificio para saludarlo.
El lateral, de 36 años y el futbolista con mayor número de títulos en el mundo, retribuyó la acogida y vestido con una chaqueta oficial del Sao Paulo besó el escudo del club tricolor ante los aficionados.
"Un sueño de hincha realizado por el jugador", afirmó Alves en una fotografía que publicó en las redes sociales y en la que aparece besando el escudo.
El futbolista, que ha pasado por clubes como FC Barcelona, Juventus y Sevilla FC y que estaba sin equipo desde que en junio venció su contrato con el París Saint Germain, fue anunciado el pasado jueves como nuevo jugador del Sao Paulo, con el que firmó un contrato hasta diciembre de 2022.
El lateral, titular habitual de la selección brasileña desde 2006 y que cuenta con cuatro títulos con la Canarinha, con la que ha disputado dos mundiales, admitió entonces que es hincha del Sao Paulo desde niño y que estaba cumpliendo un sueño.
El lateral será presentado en la noche del martes como nuevo jugador del club tricolor en otra fiesta programada en el estadio Morumbí y para la que ya se vendieron más de 21.000 entradas. La dirección del club espera que la asistencia supere los 45.000 hinchas que en 2011 recibieron al también ídolo repatriado Luis Fabiano.
La conquista en julio pasado como capitán de Brasil de la Copa América, torneo del que fue elegido como el mejor jugador, le permitió a Alves sumar 40 títulos en sus 19 años de carrera profesional, lo que lo convirtió en el futbolista más laureado del mundo.
El defensor, a pesar de varias ofertas de clubes de Asia y Europa, fue seducido por el "proyecto" del Sao Paulo y optó por retornar a su país después de 17 años, cuando dejó en 2002 al Bahía, club de su estado natal, para fichar por el Sevilla de España.
El lateral, sin embargo, se incorporará a un club que, pese a ser uno de los más tradicionales de Brasil, no alza títulos desde 2012 cuando conquistó la Copa Sudamericana y atraviesa una mala racha de resultados.