El exseleccionador español Luis Enrique Martínez se vio obligado a dejar el cargo al frente de España como consecuencia del grave problema familiar que este jueves se ha conocido cuando el propio entrenador anunció el fallecimiento de su hija Xana a los 9 años de edad a causa de un tumor óseo.
Luis Enrique llegó al cargo de seleccionador el 9 de julio de 2018 para ocupar el hueco dejado por Fernando Hierro, apuesta provisional en el Mundial de Rusia tras el despido de Julen Lopetegui a dos días de debutar, para liderar un profundo proyecto de reestructuración.
Tras dirigir siete partidos, cinco oficiales y dos amistosos, con cinco triunfos y dos derrotas, Luis Enrique se tuvo que marchar de una concentración de la selección para un partido de clasificación a la Eurocopa 2020.
El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, y el director deportivo José Francisco Molina, comunicaron la renuncia de Luis Enrique por la grave situación que provocó su salida de Malta en día de partido de clasificación a la Eurocopa 2020 y fue Robert Moreno quien desde ese momento dirigiese los dos últimos ante Islas Feroe y Suecia.
La intención de la RFEF fue en todo momento esperar al regreso de Luis Enrique, respetando el tiempo que necesitase para centrarse en exclusividad a su familia y su hija Xana: "Era la única posibilidad que contemplamos. Hace un año empezamos un proyecto deportivo con Luis Enrique que va de una manera estupenda y queríamos que siguiese ese proyecto", manifestó Molina, con máximo respeto por la decisión adoptada por el entonces exseleccionador y mostrando todo su apoyo en el duro momento por el que atravesaba, compartido por futbolistas, medios y profesionales de la comunicación.
Finalmente, la situación obligó al asturiano a dejar el cargo en manos de Robert Moreno de forma definitiva: "Luis Enrique no va a seguir como seleccionador y le tengo que dar las gracias. Es un tío que se ha portado de 10 con la Federación. No tenemos ningún reproche, al contrario, seguimos estando muy unidos con él. Le he transmitido que siempre tendrá las puertas de la selección abiertas", dijo Rubiales.
Desde entonces, Robert Moreno se convirtió en el entrenador número 56 de la historia en ocupar el banquillo de la Selección, agradeciendo a Luis Enrique todos y cada uno de los avances que ha conseguido en su trayectoria en múltiples ocasiones.
Moreno siempre ha reconocido públicamente la enorme influencia del asturiano en su carrera, al que acompañó como segundo entrenador en el Barcelona, el Celta -también con Unzué- y la Roma.