La última década en el mundo del fútbol ha estado marcada por el duelo entre Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Sobre el campo no ha habido nadie mejor que los dos futbolistas de leyenda, en los que también se pueden destacar los vehículos de uno y otro. El catálogo de coches del argentino y el portugués están a la altura de su categoría como jugadores.
Uno de los mayores en cuanto a tamaño es el Cadillac Escalade. Este 4X4 monta un motor atmorsférico de 6,2 litros y 8 cilindros en V que rinde hasta los 420 CV.
El Range Rover lleva un motor 5,0 de 8 cilindros en V, sobrealimentado por un compresor volumétrico. Alcanza los 550 CV. Acelera de 0 a 100 km/h en solo 5,1 segundos.
Otro de ellos es el Audi Q7. Su gama más alta es el SQ7, que llega hasta los 435 CV. Lo permiten su motor 4.0 V8 TDI.
Siguiendo con Audi, también posee un Audi R8 Spyder. Se trata de la versión descapotable del R8. La versión más potente monta un propulsor 5.2 V10 que alcanza los 550 CV.
El motor del Ferrari F430 Spider tiene 4,3 litros de 8 cilindros en V llega hasta los 490 CV. Es del 2005, pero ya entonces aceleraba de 0 a 100 en de 0 a 100 km/h.
El Porsche Panamera, un deportivo a la par que elegante, envuelve un propulsor V8 de 4,8 litros que ofrece una potencia de 550 CV.
La versión más potente del Range Rover Evoque es la versión de gasolina de 4 cilindros y 280 CV.
Por último, entre los coches de Leo Messi se encuentra un Lexus LX 570. Monta un 5,7 litros de 8 cilindros que ofrece una potencia de 388 CV.
La colección de Cristiano Ronaldo es inmensa y sólo en Turín tiene varios de los más lujosos del mercado.
El Ferrari F12tdf, un exclusivo modelo que tan sólo cuenta con 799 unidades en el mercado y que posee un V12 atmosférico y 780 caballos de potencia, es de esos vehículos que, literalmente, quitan el hipo.
También tiene un Bugatti Chiron, el más caro de su marca con detalles hechos a su medida y con ni más ni menos que 1.500 caballos de potencia debajo del plató. Es, de lejos, el más lujoso de todos los que tiene en su garaje.
Y es que también tiene otro Bugatti, el Veyron Vitesse, que tampoco es que esté nada mal precisamente. Se trata de la versión descapotable del Veyron Supersport y cuentan con 1.200 caballos.
Por otro lado, un Lamborghini Aventador. No es el más moderno de todos ya que corresponde a la primera serie, pero sigue siendo uno de los coches más codiciados del mercado.
No podía faltar un Rolls-Royce Ghost, un coche más enfocado, por decirlo de alguna manera, a la familia.