Santiago de Chile, 30 oct (EFE).- El Gobierno chileno ratificó este miércoles su voluntad de que la final de la Copa Libertadores se dispute el 23 de noviembre en Santiago pese a la crisis política y social que vive el país desde hace casi dos semanas.,La nueva ministra de Deportes, Cecilia Pérez, dijo en una rueda de prensa que le transmitió al presidente de laConfederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, la "firme voluntad y compromiso" del Gobierno para que el duelo en
Santiago de Chile, 30 oct .- El Gobierno chileno ratificó este miércoles su voluntad de que la final de la Copa Libertadores se dispute el 23 de noviembre en Santiago pese a la crisis política y social que vive el país desde hace casi dos semanas.
La nueva ministra de Deportes, Cecilia Pérez, dijo en una rueda de prensa que le transmitió al presidente de laConfederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, la "firme voluntad y compromiso" del Gobierno para que el duelo entre el River Plate argentino y el Flamengo brasileño se dispute en el Estadio Nacional de la capital.
Pérez subrayó que un acontecimiento deportivo de ese tipo "le hace bien al país" y añadió que el Ministerio del Interior coordinará las medidas para garantizar la seguridad el día de la final, la primera de la Libertadores que se disputará a partido único.
"Es una de las tantas fiestas que le hace bien al país, y vamos a estar trabajando en conjunto con el Ministerio del Interior, y conversaciones permanentes con Conmebol, para llevar a cabo esta final de Copa Libertadores", indicó Pérez, que hasta hace dos días era la ministra portavoz del Ejecutivo.
La cancelación del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) y la 25ª Conferencia sobre Cambio Climático de Naciones Unidas (COP25) anunciada este miércoles por Piñera debido a las protestas sembró dudas sobre la final de la Copa Libertadores.
La Conmebol, a través de su cuenta de Twitter, agradeció el "compromiso" del Gobierno chileno para garantizar la seguridad. "La final es la celebración del fútbol con y para el pueblo chileno. Seguimos avanzando", indicó.
Este martes, la Conmebol informó de que Domínguez viajará los próximos días a Santiago para reunirse con Piñera para conversar sobre los preparativos de la final.
Chile atraviesa una ola de protestas sin precedentes desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) para reclamar más igualdad y otras demandas sociales, que han dejado una veintena de muertos.
La inestabilidad social en el país provocó que la Conmebol suspendiera unos días atrás la Copa América de Fútbol Sala que debía disputarse en la ciudad chilena de Los Ángeles entre el 23 y el 30 de octubre.