La Ligue 2 francesa ha vivido esta jornada uno de los fallos más estrepitosos que se recuerdan en un campo de fútbol. El autor ha sido Brice Maubleu, portero del Grenoble, que intentó comenzar una jugada sacando a un compañero... y terminó colando la pelota en su propia portería.
Sucedió en el choque del Grenoble en la visita al Michel d'Ornano, estadio del Caen, en partido de la segunda división francesa. Ya con 1-0 en el marcador, una pelota dividida acabó en las manos de Maubleu, que buscó a su lateral zurdo para salir jugando rápido.
Le gardien de Grenoble, Brice Maubleu, a commis l'irréparable face à Caen ! Le gardien grenoblois a voulu relancer à la main mais s'est mis le ballon dans son propre but.#ligue2 #football #boulette #gardien #Caen #Grenoble pic.twitter.com/VS9gdKMl6R
— Anthony Ménès (@MenesAnthony) February 28, 2020
Sin embargo, la pelota se le escurrió y en lugar de ir hacia adelante fue hacia atrás, en dirección a la portería. Con los nervios, el portero francés no fue capaz de sacarla y, pese a sus protestas, el árbitro terminó señalando que el balón había cruzado la línea de gol.
Brice Maubleu se lamentó tras el partido, que finalizó con derrota para el Grenoble por 2-0: "Hay noches oscuras y esta es una de ellas. En el gol, quería jugar rápidamente para Jérôme Mombris, pero vi que no me estaba mirando, así que cambié de decisión y luego la pelota se me escapó de las manos".
"La posición de portero está muy expuesta y se corren riesgos. Después volví al partido e hice varias paradas que no se recuerdan. Tendré que trabajar duro para salir adelante, aunque seguro que me llegarán muchas bromas en redes sociales", finalizó en sus declaraciones el guardameta, recordando un error similar del internacional francés Mandanda con el Marsella hace unos años.