Ni espontáneos ni pájaros. En esta ocasión ha sido un gato el que ha interrumpido un partido de fútbol disputado en tierras australianas. El animal saltó al terreno de juego y se cruzó el campo entero ante la atenta mirada, y aplausos, de los presentes.
En el vídeo superior podrás ver la divertida anécdota al completo.