La plantilla del Osasuna trabajó en la tarde de este viernes sobre el terreno de juego del estadio de La Cartuja, donde el sábado se mide al Real Madrid en la final de la Copa del Rey, y se aclimató a la alta temperatura con la que Sevilla ha recibido a la delegación navarra.
La sesión preparatoria, sobre el aparentemente bien cuidado césped del estadio, fue a continuación de la conferencia de prensa que ofreció en el propio escenario de la final el entrenador del equipo, Jagoba Arrasate, y el capitán de la plantilla, el pamplonés David García.
El entrenamiento se inició sobre las seis de la tarde, con el sol todavía muy alto y con una alta temperatura, ya que los osasunistas fueron los primeros en comparecer ante la prensa y en ejercitarse, pues tras ellos se fijó la entrada en acción de los madridistas.
De todas formas, aunque para el sábado se prevé la misma temperatura que este viernes, con una máxima de 32 grados, el partido está fijado para las diez de la noche, con lo que la sensación de calor será menor.
En el cuarto de hora que el entrenamiento estuvo abierto a la prensa, se vio a Arrasate muy atento a las evoluciones de los suyos en una sesión en la que participaron todo a excepción de las dos bajas confirmadas por lesión. Tanto el defensa Nacho Vidal y la del centrocampista serbio Darko Brasanac, no podrán disputar minutos, pero sí se encuentran en Sevilla junto al resto de compañeros.
Ejercicios de calentamiento y jugadas de ataque con centros y remates a puerta de una a otra portería en un campo reducido en sus dimensiones, fue lo que se vio antes de que el técnico vizcaíno se quedara ya solo con los suyos para ultimar los detalles de la preparación del encuentro ante el Real Madrid.