El pasado fin de semana tuvimos que lamentar un nuevo episodio de violencia hacia el colectivo arbitral. Ocurrió en la localidad pontevedresa de O Porriño, en el partido  entre CD Pontellas y Candeán de benjamines. Según informa el portal vigoe.es, y se hace eco Uxío Caamaño, exárbitro y especialista arbitral en varios medios de comunicación, conocido en redes sociales como Mr. Asubío, los hechos acaecieron el pasado domingo por la mañana. Y es que, según cuentan las distintas informaciones, el padre de uno de los jugadores locales trató de agredir al árbitro, de tan solo 14 años, al término de este encuentro, insistimos, de benjamines. Es decir, de niños con edades comprendidas entre los ocho y los nueve años.

La Guardia Civil ya está investigando lo acontecido en las instalaciones del Pontellas, ya ha abierto diligencias y se encuentra en trámites para tratar de aclarar lo sucedido y encontrar al culpable o culpables de lo ocurrido.

El relato del propio colegiado, Mikel, es escalofriante. En el acta arbitral cuenta que parte de la afición local comenzó a increparle desde la grada en los siguientes términos: "Borracho, deja los cubatas"; "Payaso, te voy a espabilar yo"; "Hijo de puta, te espero fuera"; entre otras amenazas. Cuando el joven se dirigía hacia el vestuario, un varón adulto se le abalanzó con la mano levantada con la clara intención de agredirle. Un intento que, en primera instancia, frenó un aficionado del equipo visitante, al que poco después se le unieron varios más.

El Pontellas tapó al agresor del árbitro

Prosigue el colegiado contando su versión de los hechos, teniendo problemas con la seguridad del campo de fútbol para acceder a su propio vestuario y sin que estos quisieran llamar a las autoridades. Poco después el padre del joven, Guardia Civil de profesión, se personó para auxiliar al colegiado identificándose como Fuerzas del Orden. Es entonces cuando, entre el entrenador y el presidente del Pontellas (siempre según el relato del acta arbitral), pusieron trabas a este miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para acceder al vestuario del árbitro, donde su propio hijo se encontraba encerrado y aterrorizado ante la situación tan desagradable que le tocó asumir.

Tras acceder el padre del joven, lograron ponerse en contacto con el 062 y dos patrullas de la Guardia Civil y una de la Policía Local se personaron en el estadio del Pontellas.

Un miembro de la directiva de este club, además, habría justificado los insultos, vejaciones e intento de agresión hacia este árbitro de 14 años. Según el relato del colegiado, habría dicho "si el árbitro no hizo el curso, que ahí le deben enseñar a que le llamen hijo de puta y demás insultos, y que situaciones como la de abalanzarse el señor son cosas normales y habituales". Unas palabras por las que la Guardia Civil procedió a su identificación para proceder con una denuncia.

Del mismo modo, cuando las autoridades procedieron a intentar dilucidar la identidad del atacante, que abandonó las instalaciones antes de que llegaran las patrullas, nadie le identifica. Incluso uno de los allí presentes afirmó que sabía quién era, pero no lo dijo. Poco después, Mikel logró salir de las instalaciones, quedándose las autoridades investigando lo sucedido allí.

Denunciado el intento de agresión al árbitro de 14

Desde el Comité de Árbitros también denuncian que el CD Pontellas no atendió la demanda del colegiado, que una vez finalizado el choque solicitó la presencia de las fuerzas de seguridad "al temer por su integridad".

Asimismo, lamentan que un directivo del Pontellas -identificado posteriormente por la Guardia Civil-, ya dentro del vestuario, manifestó a viva voz "si el árbitro no hizo el curso, que ahí le deben de enseñar a que le llamen hijo de puta y demás insultos y que situaciones como la de abalanzarse el señor son normales"

Un nuevo capítulo de violencia contra los árbitros que tenemos que aguantar en nuestro fútbol. Cualquier tipo de conducta de este tipo no solo es reprobable, sino total y absolutamente repudiable. Estas conductas no tienen cabida en el deporte, más aún cuando se trata del fútbol formativo, que trata de enseñar a los jóvenes futbolistas en valores como el respeto, la deportividad y a divertirse jugando.