En el Día de la Independencia de Estados Unidos, un español dominó la MLS. Riqui Puig lideró al LA Galaxy para llevarse el derbi angelino por 2-1. Un partido histórico para la MLS, ya que se convierte en el encuentro con más espectadores de su historia, llegando a las 82.110 personas en el estadio Rose Bowl. El anterior récord lo tenía el partido de 2022 entre el Charlotte y el Galaxy con 74.749 espectadores.
El catalán marcó el gol de la victoria y lo celebró señalando varias veces a su dorsal, un gesto muy parecido al que hizo en mayo tras otro golazo al LAFC -esa vez quitándose la camiseta y enseñándola a la grada- y que recordó a la célebre imagen de Leo Messi en 2017 festejando un 2-3 épico del Barcelona ante el Madrid.
RIQUI PUIG IS HIM. pic.twitter.com/nYt6VQivJz
— LA Galaxy (@LAGalaxy) July 5, 2023
El catalán aseguraba en declaraciones postpartido que "Todo jugador quiere estar en estos partidos. Yo no juego por dinero, sino por estas experiencias (...) Me lo he pasado como un niño pequeño y creo que he dado un gran nivel".
Puig fue esta noche el director de orquesta de este Galaxy muy necesitado de alegrías, ya que llegó a este partido como penúltimo del Oeste, con cuatro empates seguidos y con una temporada repleta de disgustos tras las lesiones de larga duración del mexicano Javier 'Chicharito' Hernández y del uruguayo Martín Cáceres.
Tyler Boyd firmó el primer tanto del Galaxy y el español Ilie Sánchez consiguió la diana del LAFC.
Vigente campeón de la MLS y liderado por el mexicano Carlos Vela, el LAFC, que desaprovechó numerosas ocasiones para lograr el empate en los últimos minutos del duelo, suma ahora tres derrotas seguidas.
Los Galaxy también ganaron el anterior derbi, en el cual Riqui Puig marcó y mostró su camiseta a los fans rivales, algo que no gustó nada a Giorgio Chiellini, que le llamó "payaso" después del partido. Con estas dos victorias el jugador catalán asegura que han "demostrado ser mejores" y que si superan la mala racha entraran en los playoffs.
Había muchos ojos puestos en Puig y el exculé no decepcionó, ya que fue el mejor de la primera parte mostrando descaro, ideas claras y mucho picante en ataque cada vez que el balón caía en sus pies. De hecho, estuvo muy cerca de lograr el primero de su equipo llegando desde la segunda línea pero no culminó la jugada por centímetros.
El primero en abrir la lata fue el Galaxy gracias a Boyd, que se dio la vuelta en el pico del área y que se inventó un precioso disparo con rosca al segundo palo ante el que no pudo hacer nada John McCarthy.
El guion cambió tras el paso por los vestuarios y el LAFC salió con energías renovadas y decidido a agarrar el timón.
Tuvo premio ese cambio de actitud, ya que Sánchez, con un muy difícil remate de cabeza en el primer palo y tras un córner, igualó el marcador para el LAFC.
Con el encuentro en un terreno más tenso y brusco en el que no escasearon las tarjetas amarillas, el Galaxy explotó al contragolpe los huecos atrás del LAFC y así llegó el gol de Puig.
Douglas Costa abrió con el exterior el balón en la izquierda para Boyd, que vio la llegada por el centro y a toda velocidad de un Puig que mandó el balón a la red justo delante de la zona en la que estaba la grada de animación del Galaxy.