Raúl López y cómo ser portero con un 70% de discapacidad auditiva: de los audífonos a la ayuda vital de sus compañeros
Raúl López es un portero de Málaga y tiene 16 años. Juega en categoría juvenil y tiene un 70% de discapacidad auditiva, algo que no le impide hacer vida normal. En algún momento ha tenido que lidiar con los problemas que le causa este factor, pero nada que le haya hecho bajar el rendimiento bajo los palos. Tiene ayuda, por supuesto. Los audífonos y los compañeros son claves para los momentos en los que puede darse algún problema.
Él lo lleva con total naturalidad. Tal es así que jugará en División de Honor, una de las categorías de mayor nivel para su edad. Se llama Raúl López y en el vídeo superior nos cuenta en exclusiva para ElDesmarque su historia.
El mejor portero de Málaga con discapacidad auditiva
Uno de los problemas que a priori todo el mundo se podría preguntar tras conocer su situación es cómo se desenvuelve el portero durante un encuentro. Al fin y al cabo, la comunicación es vital en el fútbol, y tener 70% de discapacidad auditiva puede generar problemas. Según él, el ser portero ayuda, pero si algo ocurriese ahí están los compañeros.
“Yo veo el campo. Ellos realmente no me tienen que decir nada, soy yo el que tiene que decir la cosas que pasan”, dice como buen portero que es. “Les grito si tienen algún jugador cerca, los despejes… Los entrenadores a veces vienen a la portería a decirme lo que quieren o a veces se lo dicen al central para que me lo cuente”.
Esto ha sido un proceso, por supuesto, ya que al principio costaba generar esa comunicación. “Me cuesta menos. Ya me comunico con mis compañeros, los entrenadores ya saben lo que tengo… Me dan la confianza para dar lo mejor de mí”.
Los audífonos le acompañan en todo momento, aunque puedan ser aparatosos en algunas circunstancias. En Málaga, en verano, hace calor, y el sudor…
“Tengo los aparatos, pero el problema que tengo ahora en pretemporada en verano es que sudo mucho. El sudor entra dentro del aparato y eso hace que las pilas no hagan buen contacto y se me apaguen por completo. Entonces me los tengo que quitar”
Sin embargo, su familia se las ha lidiado para que el chaval pueda jugar lo más cómodo posible. Han creado para ayudar al portero de Málaga “Un cablecito de silicona que va de un aparato a otro por detrás de la cabeza y eso hace que se aguanten. Para cuando me tiro, para los despejes, hace que no se caiga porque está hecho a medida”.
