Jaume Roures ha sido desvinculado de Grup Mediapro por el Consejo de Administración. Deja la empresa audiovisual después de 30 años. Se aleja de la empresa por petición expresa del grupo chino Southwind Media. A los mandos se quedará Tatxo Benet, quien ya compartía la dirección del grupo con Roures.
Tatxo Benet nació en Lleida en 1957. Es periodista, empresario y coleccionista de arte contemporáneo. Tras trabajar en diario El País y en el Periódico de Catalunya, en 1883 comenzó a formar parte de la TV3-Televisió de Catalunya. Allí coincide con Jaume Roures y cuando comienza su andadura en el mundo deportivo.
En 1997 es nombrado Director General de Audiovisual Sports, empresa que junto a Sogecable, Antonio Asensio y Televisió de Catalunya tenía los derechos audiovisuales de LALIGA.
Abandona su puesto y crea su propia empresa de producción. En el año 2000, esta sería fagocitada por Mediapro, creada por Jaume Roures.
Su vinculación con el deporte no solo ha sido por profesión. Tatxo Benet ha demostrado en numerosas ocasiones ser un aficionado más del fútbol y de otros deportes, como la natación o el esquí.
En cuanto al deporte rey, es preciso señalar que fue el máximo accionista del Unió Sportiva Lleida entre 1998 y 2010. El 25 de junio de ese año abandonó la gestión y pasó a manos de Annabel Junyent, que no pudo salvar al equipo. El 25 de mayo de 2011 jugaría su último partido antes de desaparecer.
Entre sus publicaciones se ha pronunciado por varios casos, como los insultos racistas a Vinicius la pasada temporada en Mestalla. Sobre este caso, consideró que “España es un país racista” y que “en el fútbol es uno de los lugares donde se expresa más claramente el racismo”. Además, defendió al brasileño. “Vinicius puede ser un jugador bueno o malo, provocativo o no, amistoso o no. Nada de esto importa. Nada absolutamente nada justifica el racismo. Toda mi solidaridad sin paliativos con el jugador”, escribió en sus redes.
En cuanto al caso Negreira, también criticó los hechos cometidos por el FC Barcelona. Explicó que acudir a Enríquez Negreira podría haber sido una respuesta del club por la hipotética desigualdad que había entre los dos equipos históricamente. “Buscaron la manera de salir a jugar la liga en igualdad de condiciones. Porque si es cierto que Enríquez Negreira influyó, no tengo duda de que lo que debían buscar era un equilibrio que la opinión pública catalana pensó entonces no existía”, explicó dejando claro que está en contra de esta práctica. “Estoy totalmente en contra de prácticas como esta”, concluye.