El Real Zaragoza vuelve a jugar en casa tras tres jornadas como visitante. Ante el Elche, el equipo maño debutará en La Romareda, cuya imagen resulta cuanto menos impactante. Hoy la afición blanquilla echará en falta el mítico Gol Sur, que ya es pasado, después de haber sido derruido este pasado verano debido a la profunda renovación que está sufriendo el estadio. Será la primera vez en la historia en que ningún aficionado apoye al Real Zaragoza desde ese graderío.
Lo cierto es que La Romareda ha perdido una gran parte de su historia. En la portería ubicada en el Gol Sur se han anotado tantos tan importantes como el de Álvaro Maior para certificar la salvación en la temporada 03/04 o históricos como el tanto de Ewerthon en las semis de Copa en 2006 que puso el 6-1 en el marcador ante ni más ni menos que le Real Madrid de los galácticos.
En su lugar, una lona ocultará las obras que aún se realizan en ese sector. En ella se puede leer 'Zaragoza nunca se rinde', lema de la ciudad del Ebro. Así se mantendrá hasta el final de la temporada. De cara a la campaña 25/26, el Real Zaragoza se mudará temporalmente a un estadio portátil y no regresará a La Romareda hasta finalizadas las obras en 2028. Para entonces, se espera que el templo blanquillo sea puntero en España.
La imagen que hoy ofrecerá la casa del Real Zaragoza será triste, un estadio a medias que ha perdido uno de los graderíos más históricos del fútbol español. No obstante, eso no debe hacernos olvidar el verdadero significado de que La Romareda se encuentre hoy así: el Real Zaragoza está progresando hacia un futuro mejor.