El Raja incide en la vieja herida defensiva rojiblanca
La pretemporada del Athletic acaba de comenzar. Solo ha disputado dos amistosos. Pero de ambos se puede extraer la misma conclusión: los rojiblancos no han conseguido resolver los graves problemas defensivos que les penalizaron en la recta final de la pasada campaña. Este mal ha quedado especialmente retratado en el compromiso frente al Raja Casablanca. El equipo de Bielsa ha encajado tres goles, pero han podido ser más si los atacantes del conjunto marroquí hubieran estado más acertados de cara a puerta.
Solo en la primera mitad, Raúl ha tenido que hacer frente a cinco situaciones de mano a mano ante diferentes rivañes. Dos de ellas han acabado en gol: uno de penalti, ejecutado por Metouali a lo Panenka, y el otro con un potente zurdazo de Karraouchy tras haberse dehecho de cuantos leones le salían al paso. En la segunda mitad, Iraizoz también se quedaba solo ante Iajour. Demasiadas facilidades para plantarse cara a cara ante cualquiera de los dos porteros rojiblancos.
Es de justicia reseñar las importantes ausencias que padece en estos momentos la defensa bilbaína. Javi Martínez se encuentra concentrado con la selección olímpica, Amorebieta arrastra unas persistentes molestias en el pubis y San José tiene varicela. El eje de la zaga, en esta tesitura, lo han formado Ekiza y Aurtenetxe, con Iraola e Iñigo Pérez en los carriles. Pero los problemas aparecían más arriba. Las peligrosas pérdidas en la iniciación de las jugadas desde la medular ha sido la principal fuente de peligro. Igual que sucedió a finales de la pasada campaña, cuando los bilbaínos recibieron la friolera de catorce tantos en sus últimos seis partidos. Incluidas las finales ante Atlético (3-0) y Barcelona (0-3). Bielsa aún no ha dado con la fórmula para frenar la sangría.