El entrenador rojiblanco ha expulsado, previsiblemente, al delantero tras observar su comportamiento durante el partidillo que disputaban los suplentes en la sesión preparatoria frente a jugadores del Bilbao Athletic. En un parón de la pachanga ha tenido lugar el intercambio de palabras entre ambos y sobre las 11,25 el de Rincón de Soto se ha ido al vestuario y seguidamente a su domicilio sin pasar por el gimnasio a levantar pesas, como suele hacer habitualmente. Si ya es complicada la situación del delantero riojano en el club, ahora se vive un nuevo episodio que dará que hablar negativamente. Tanto sobre su relación con el técnico, constántemente puesta en entredicho, como de sus opciones -cada día más lejanas- de renovar por la entidad rojiblanca. Ahora queda por ver si mañana martes el 'Loco' le incluye en la convocatoria para jugar en Praga ante el Sparta el jueves.