Los socios toman la palabra en la Asamblea del Athletic
de Copa y Europa League en el deportivo. Lo único que empaña estas realidades en el club rojiblanco son las polémicas que han tenido lugar desde el pasado mes de julio. Las obras, la salida de Javi Martínez, la no renovación de Llorente, su expulsión del entrenamiento, las grabaciones... El presidente del Athletic ha comparecido en contadas ocasiones para exponer su postura ante todas estas cuestiones. Los socios tienen hoy (19.30 horas en el Palacio Euskalduna) la oportunidad de preguntar sobre aquellos puntos que no hayan quedado del todo aclarados. Es la forma de hallar el equilibrio entre todos los pilares que sustentan la entidad. Deportivo, económico e institucional.
Los números sonríen al de Lekeitio. La brillante temporada pasada ha dejado un beneficio de más de dos millones gracias a los cuantiosos ingresos por parte de la UEFA, que alcanzaron los 9'5 millones. Ese respaldo le permite presentar unas cuentas positivas al cierre de la 2011-12. La cláusula abonada por el Bayern de Munich en el fichaje de Javi Martínez auguran un futuro cómodo en lo económico. La directiva de Urrutia ha decidido invertir este dinero en liquidar la deuda con Hacienda y en Lezama, la base del equipo.
El arranque de este curso en el terreno deportivo ofrece más dudas que el anterior. El triunfo sobre Osasuna permitió a los de Bielsa abandonar los puestos de descenso en la Liga, pero los puestos europeos -verdadero objetivo- siguen lejos. En Europa, son colistas de su grupo tras el empate ante el Hapoel y la derrota en Praga. La Copa aún no ha empezado. De aquí a navidades se enfrentan a un tramo clave de la campaña.
En el plano institucional, la principal crítica que ha recibido el máximo mandatario rojiblanco afecta a su política de comunicación.
Los problemas extradeportivos se consideran los suficientemente graves como para haber tenido respuestas inmediatas de Urrutia en cada caso. Este, en cambio, se ha hecho esperar casi siempre. Algunos le acusan también de inacción. José Julián Lertxundi, por ejemplo, empleó una frase muy gráfica en declaraciones a Mundo Deportivo: "Cuando el gato no está, los ratones bailan". El expresidente relacionaba el descontrol de algunos jugadores (filtraciones y demás) con la discreta política de Urrutia. El de Lekeitio, por su parte, respondía a estas y a otras palabras de exrojiblancos solicitando "empatía". "Sería bueno que repasaran lo que hicieron antes de criticar". Esta tarde (19.15 horas en primera convocatoria, 19.30 en segunda) tiene la posibilidad de contestar a los socios en el Palacio Euskalduna.