Los rojiblancos en caso de superar al Eibar con el que empataron a cero en el encuentro de ida disputado en Ipurua ya conocen a su posible rival en octavos de final.
Como era previsible, el Málaga es el equipo clasificado para esos octavos de final. Los malacitanos habían ganado ya en el encuentro de ida en tierras extremeñas por tres goles a cuatro y tenían más que encarrilada la eliminatoria. Sin embargo, el equipo de Pellegrini sufrió incomprensiblemente ante el equipo de Segunda B que tuvo contra las cuerdas a todo un equipo de Champions.
El Cacereño no solo ganó el encuentro por 0-1 con el tanto de Chapi a los 37 minutos al rematar una falta en un fallo defensivo de los locales. El equipo de Pellegrini, lejos de reaccionar, se vio sobrepasado y nervioso por el resultado ya que un nuevo gol les dejaba fuera de la Copa. Primero Gaspar que no acertó a mandar al fondo de las mallas una clara ocasión y después Checa que vio como le anulaban un tanto en el tramo final del encuentro.
El Málaga respiró con el pitido final y ya espera en octavos de final al ganador de la eliminatoria entre el Athletic y el Eibar. De pasar los rojiblancos el encuentro de ida se disputaría en San Mamés el martes 18 o miércoles 19 de Diciembre.