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Jonás Ramalho, ruge el nuevo 'león'

Periodista. De norte a sur pegada al balón.

Jonás Ramalho ya es una realidad. Después de cinco campañas calentando motores, pasando controles de calidad y puliendo al detalle las prestaciones que traía de serie, Bielsa por fin le ha dado la oportunidad de competir entre los mejores con regularidad. Se ha convertido en el protagonista ideal para nuestro reportaje 'Seat León' y el ideal para compartir portada con el lanzamiento del nuevo coche de Seat este jueves 13 de diciembre.

En las dos últimas semanas ha disputado más partidos oficiales en el primer equipo del Athletic que en toda su carrera, todavía en una fase muy incipiente. La intrascendencia del encuentro ante el Hapoel Kiryat Shmona en Haifa (0-2) le colocó en la parrilla de salida y su excelente respuesta, unida a los problemas físicos de Iraola, le permitió seguir apurando las marchas hasta consolidarse como nuevo león. Su fiablilidad ha convencido al de Rosario.
Tras el citado compromiso de Europa League, ha jugado ininterrumpidamente ante Barça, Sparta Praha, Celta y Eibar. Cinco partidos en los que la afición rojiblanca ha podido ver la potencia que caracteriza al joven defensa de Leioa. Su enorme capacidad física le permite recorrer infinidad de kilómetros por la banda derecha, incombistible, y en los últimos tiempos ha mejorado su precisión a la hora de asociarse en los últimos metros. Ha conectado buenos centros que pueden aprovechar los delanteros. Atrás también ha experimentado una evolución palpable. Domina el juego aéreo y ha aprendido a manejar su físico para ganarle la partida a rivales más fuertes y experimentados.
Sus condiciones no pasaron por alto para Caparrós, que se fijó en Ramalho, más conocido entonces en su entorno como Joni o como el 'brother' de Muniain, cuando solo era un prototipo. Tenía apenas catorce años cuando le citó para el primer amistoso con los 'mayores'. Fue el 27 de febrero de 2008, en Urritxe. Saltó al campo en el minuto 66 para consolidar el triunfo sobre el Amorebieta por 0-2. Esa misma campaña, en mayo, volvió a tener una oportunidad en otro ensayo ante el Aviron Bayonnais.
La temporada siguiente, la 2008-09, participó en cuatro bolos veraniegos. Ante San Roque de Lepe, Ayamonte, Lemona y Tenerife. Y sumó cinco amistosos más en los dos cursos siguientes, mientras seguía creciendo en el filial y el utrerano se debatía entre si estaba listo o no para dar el salto. Estuvo cerca, pero prefirió esperar.
Después llegó Marcelo Bielsa, un técnico de ideas fijas. El argentino es de los que apuesta por un estrecho grupo de confianza en el que es muy difícil entrar. Pero la fiabilidad de Jonás en el Bilbao Athletic y su proyección de cara al primer equipo tampoco pasaron inadvertidas para él. Y el 20 de noviembre del año pasado, en uno de los mejores encuentros firmados a domicilio en la campaña más ilusionante de la etapa reciente del Athletic, le dio la alternativa. Fue en la victoria sobre el Sevilla en el Sánchez Pizjuán (1-2). Y el 5 de mayo, sin más objetivos ya en la Liga que quedar lo mejor posible en la tabla, debutó como titular ante el Getafe (0-0).
Antes del arreón que ha experimentado su carrera en las dos últimas semanas, también participó en el triunfo sobre el Slaven (3-1) y el empate ante el HJK Helsinki (3-3). Un bagaje que ha animado a Bielsa a apostar por el de Leioa como una alternativa firme para el primer equipo rojiblanco. Un nuevo león que apunta a gama alta.

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