El fútbol viene como viene. Entre la sangría goleadora, la posibilidad de jugar partidos en Europa para los jóvenes o la anómala situación de Fernando Amorebieta, el central galo ha sabido coger su tren.
Marcelo Bielsa ya dijo tras la prueba en Israel que jugará en cada posición el que más lo merezca sea del primer o del segundo equipo. Laporte lo ha hecho bien y el equipo no ha encajado gol en sus cuatro comparecencias. Aunque ante el Celta solo jugara un minuto.
Sus compañeros y pesos pesados en la caseta, como Iraola o Gurpegui, han destacado su aplomo y tranquilidad pese a contar tan solo con 18 años. Ahora, contando hoy con la presencia de su padre en Lezama para seguir el entrenamiento de Aymeric, ya puede celebrar que es un león más, con toda la barba.
Se le ata de manera que los escasos tres millones que lucía su anterior acuerdo como cláusula de rescisión (según As) se eleven de forma importante ante el mercado.
El futbolista, en su twitter, ha señalado que está "muy contento por tener ficha del primer equipo, pero esto acaba de empezar y hay que trabajar duro. Eskerrik asko x vuestros ánimos", expresaba.
Queda por ver qué influencia tiene este gesto en el futuro contractual de Amorebieta, que acaba contrato en junio y mantiene posturas alejadas con la directiva.