Asís Martín III BilbaoEl Athletic se ha reencontrado con el sabor de la victoria cinco jornadas después derrotando por goleada además al segundo clasificado de la Liga. San Jose, Susaeta y De Marcos han marcado los goles en un partido vibrante, en el que Gorka Iraizoz ha sido clave y del que Borja Ekiza se ha ido lesionado tras sufrir una durísima entrada del Cebolla Rodríguez.
La veteranía y experiencia que le dan sus ya 420 partidos oficiales a Iraola no engañaban, "necesitamos refrendar lo del Betis con una victoria", decía el de Usurbil en la previa. Y es que más allá de mejorar la imagen el Athletic necesita ganar y mucho. Los empates son como curar una gripe con tiritas. Si cuando se empine el calendario pierdes dos-tres partidos el enfermo se va a la UVI de cabeza. Así que hoy se ha aprovechado esa especial adrenalina que generan el Atlético y Simeone para hacer bueno lo ocurrido en Sevilla.
Más allá de revanchas de Bucarest, ya que nunca podrá valer un partido como una final europea, lo importante es sumar tres puntos y encima ante uno de los de arriba, algo que estaba costando años lograr. Hay que desear que este triunfo sea el inicio de la explosión del Athletic, justo el día en que no estaban los dos 'fernandos', justo el día en que todo el mundo estaba por la labor empujando en la misma dirección.
Se cumplió el 'sueño' del, o de los, que colocaron la pancarta en la sidrería de Lezama ya que Llorente hoy estuvo lejos incluso del banquillo tras sufrir una entorsis de rodilla en el entrenamiento del sábado. Sin el riojano y sin Amorebieta en la memoria colectiva sus todavía compañeros salieron al galope en una noche lluviosa de ambiente eléctrico, como cada vez que vienen los colchoneros a La Catedral. Y De Marcos la tuvo, enorme además, nada más empezar enviando a las nubes un pase de Aduriz que era medio gol.
Asistimos a un buen y trepidante inicio pero la cosa no fue sencilla. Los de Simeone presionaban a muerte y lo cierto es que Mikel San José no tenía una papeleta nada fácil en sustitución del por enésima vez ninguneado Iturraspe. Costaba sacar el balón jugado así que se optó por dar vuelo a la banda izquierda con de nuevo un buen Muniain (gran noticia) y hasta con que Aduriz bajara algo para dar él los pases interiores a los demás.
El Athletic atacaba con empuje y bravura, con incorporaciones masivas como el del año pasado, sí. Tuvo otra ocasión Sanjo de cabeza que se le fue alta, pero el riesgo de la ambición era que los errores ante un segundo clasificado se pagan y casi lo hace Aurtenetxe con una cesión con su pierna derecha a Iraizoz, que afortunadamente solventó el lio. En el 17' fue Filipe Luis tras un jugadón con caño incluído quien milagrosamente no marcaba por parte madrileña.
Era un partidazo, con velocidad, posesión mayoritariamente vizcaína y su polémica, como en el agarrón a Muniain seguramente dentro del área en una de su incursiones frente a Juanfran. La pena es la falta de gol de los de Bielsa porque la que le sacó Courtois con el tobillo a Susaeta en el minuto 21' era para comerse a mordiscos el bombín de Mister Pentland. También hubo buenos disparos lejanos de Herrera y de nuevo del eibartarra.
La batalla en el centro del campo era espectacular y ahí sufrían los del Cholo, ya que necesariamente luego notaban la ausencia de un crack como Falcao para los escasos balones que conseguían librar hacia arriba. Además Iraizoz hoy tenía el día 'de que sí', motivadísimo, y solventando con acierto algún balón complicado por el estado del césped. Luego en el 43' ante Emre ya hizo la parada de la jornada salvando un tanto cantado tras una peinada de Diego Costa permitiendo llegar al descanso con empate a cero.
En la reanudación Susaeta se encontró de nuevo con Courtois pero el gran portero belga no pudo frenar el quinto gol de San José en esta liga, entrando con furia en un córner a cabecear a placer ante una defensa muy despistada. Alegría empañada por la salvaje entrada del Cebolla Rodriguez a Ekiza, merecedora de roja, que acabó en un rosario de tarjetas del nefasto Muñiz y con el argentino en el campo de rositas e insultando a todo el que se le acercaba, mintras que Borja se fue cojo a la ducha dando paso a Gurpegui. Vergonzoso.
Buen conocedor de esas artimañas el equipo de Simeone se vino arriba en busca del área bilbaína. Godin regalando 'caramelos' a Aduriz, al que el Cata Díaz hizo un claro penalti digno del mejor judo, y el Cholo metiendo al siempre peligroso Adrián arriba. De hecho nada más salir el delantero asturiano obligaba a Gorka a hacer otro paradón en la base del poste.
Había cierto miedo a que la exigua renta llevara a dar un paso atrás porque los del Manzanares pese a la falta del azote colombiano (que alivio su ausencia) subían con todo. El Athletic sufría pero casta le sobra y Susaeta, por fin, se quitaba la espina marcando el segundo gol con un zurdazo ajustado al poste tras un gran pase de Herrera. En plena euforia De Marcos soltaba un cañonazo que estaba vez sí le entraba subiendo un 3-0 al marcador que a muchos les hizo pensar en la 'tragedia' de Bucarest y en la devolución de la moneda. Es lo bueno del fútbol, que sirve muchas revanchas.
Un gran partido, con un gran rival, y lecturas positivas, por ejemplo, como necesitaba el equipo goles de otros futbolistas que no fueran Aduriz. Así que habrá que creer que ahora sí por fin los leones van a mostrar su mejor cara, sin lios, y demostrándolo este viernes en el José Zorrilla ante el Valladolid.