Todo el mundo acaba cansándose de ver siempre lo mismo. Y el portero, en su puesto solitario y de máxima responsabilidad recibe muchas veces más críticas de las que debe. Ayer le tocó a Iraizoz. El cancerbero navarro es titular indiscutible para Bielsa, lo mismo que lo fue para Caparrós en su día. Solo las lesiones le han impedido defender la portería rojiblanca.
Iraizoz se ha destapado como un portero irregular. Capaz de lo mejor y lo peor, incluso dentro de un mismo partido. Tienen tantos defensores como detractores y el debate está en la calle. Y también en San Mamés.
Y es que la afición rojiblanca aprovechó para recriminarle su rendimiento en el encuentro frente al Espanyol. Se entiende que Iraizoz falló en los dos primeros goles 'periquitos', el primero por no salir a despejar y en el segundo por salir sin convencimiento ante Víctor Sánchez. La grada de San Mamés ya con el cero a tres en el marcador y viendo que no había capacidad de reacción en su equipo comenzó a recriminar a su portero las actuaciones.
Cada vez que tocaba el balón recibía una sonada pitada. En estas, el colegiado del encuentro, Velasco Carballo pitó penalti de Laporte sobre Víctor Álvarez que se dispuso a tirar Verdú. Iraizoz es el peor portero en estadístcas con los lanzamientos de penalti. Solo ha parado tres en su vida. Uno a Aduriz siendo portero del Espanyol, otro a Cristiano Ronaldo como guardameta ya del Athletic y el tercero ayer a Verdú. Sin embargo el rechace le fue de nuevo al jugador del Espanyol que marcó a puerta vacía.
Iraizoz no para muchos penaltis pero ha logrado romper rachas importantes como la de los 26 penaltis seguidos que llevaba transformando Cristiano Ronaldo o al detenérselo a Verdú también ha roto una dinámica en la que se habían marcado los 30 últimos penaltis lanzados en Liga.
Esta temporda le han lanzado ya nueve penas máximas con ocho goles y una parada que acabó en gol en la jugada posterior. En total con el Athletic son 46 penaltis de los que solo ha detenido dos.