Una medida lógica ante el interés despertado por el centrocampista guipuzcoano en algún otro equipo de primera en los últimos tiempos. Y es que Galarreta permanece en dique seco tras su grave lesión de ligamentos cruzados de la rodilla, lo que conlleva una lejanía del primer plano que siempre genera un cierto silencio en torno al personaje.
Ahora se solventa este caso que incluye a uno de los jóvenes con mayor proyección de la cantera rojiblanca, un cerebro llamado a tener un peso importante en el futuro del equipo vizcaíno.