Un punto que consideraba insuficiante teniendo en cuenta que "hemos tenido muchas ocasiones muy claras que no hemos podido materializar y al no ponernos con dos goles de ventaja ellos han tenido una oportunidad y ha ido para dentro", resumía.
Por todo ello el sentir del vestuario es de "dolor" porque "hemos hecho un gran partido para llevarnos los tres puntos y se te queda muy mal sabor de boca",explicaba De Marcos.
No queda otra que mirar al futuro y centrarse en el encuentro ante el Mallorca donde "ganando ya estaríamos salvados prácticamente. Es algo que llevamos buscando muchos partidos, no ha podido ser aunque el equipo ha jugado muy bien en estos últimos partidos y a ver si lo podemos sentenciar cuanto antes".