El de Zumarraga hace repaso de sus dos años en Pucela, claves en el crecimiento que le ha permitido ahora asentarse como león. “La etapa que pasé en Valladolid me ha valido de mucho, también cumplir años, porque estar un tiempo en el fútbol profesional hace que un jugador coja poso y madure. Eso también ha tenido que ver”, sostiene. A pesar de cerrar el pasado curso como el sexto rojiblanco con más minutos disputados en Liga, considera que "es un error que un jugador se vea titular antes de empezar”. “Me veo como el año pasado, como hace dos, hace tres... Peleando por un puesto para ponérselo difícil al entrenador y poder estar ahí en el primer partido de Liga”, asegura.