Por lo demás, tranquilidad en la sesión matinal de Lezama, de nuevo con calor y sol y mucho público que aprovecha los últimos coletazos del verano. El grueso de la plantilla, un día más sin el concurso de los cinco internacionales, se ejercitó sobre el verde de la factoría rojiblanca centrados en ejercicios de presión, defensa-ataque y un partidillo con un solo portero a media cancha. El equipo trabaja con mimo aprovechando el margen de maniobra con vistas al partido liguero el día 13 en el Camp Nou, una vez conquistados los primeros tres puntos de la competición doméstica y con el pasaporte europeo en el bolsillo. Este jueves se miden al Balmaseda de Tercera División en La Baluga, con espacio para los menos habituales, y el fin de semana gozarán de asueto para recargar las pilas.