Iker Muniain empezó remiso, pero acabó por llevar la iniciativa en zona ofensiva del Torino: "El míster me ha dicho que intentara recibir entre líneas y girarme para encarar a los defensas y así lo he intentado", desvelaba el extremo navarro, que jugó de falso 9. Un Athletic Club vivo en tres competiciones, prevaleciendo la Liga: "A veces con más fortuna, otras con menos, pero el equipo siempre da la cara y no se esconde".
"Es un buen resultado, marcar dos goles fuera de casa es un empate valioso y al final casi hemos podido ganar. Estoy satisfecho de cómo ha jugado el equipo", significa el canterano, que este curso no se matrimonia con el gol, aunque señala que es "optimista" para cambiar su suerte. El Athletic ha pasado a ser favorito para los octavos de la Europa League en la vuelta del jueves en San Mamés: "Eso de favorito en fútbol...., no tiene mucho que ver, pero sí que quedan 90 minutos, estamos en casa con nuestro público e intentaremos pasar la eliminatoria". El Torino, relata Muniain, es un equipo "muy físico, con jugadores muy grandes, les hemos sabido jugarles muy bien, el míster nos ha dado muchas soluciones para hacerles daño". Un cambio de sistema cuando el equipo rojiblanco había entrado en un bache en el Comunale: "Sí, hemos cambiado porque ellos jugadan con tres centrales y dos carrileros, hemos arrancado bien, nos han dominado y han tenido ocasiones, en la segunda hemos dominado nosotros", narra Muniain, que está a punto de ser padre.