Kike Sola saltó los últimos minutos ante el Getafe completando una actuación mucho más que decorosa. Un giro en la constante de Valverde, que se decanta más por la opción de Guillermo cuando Aduriz no salta al campo. En esta coyuntura de ostracismo para el potente ariete de Cascante, en Pamplona se especula con la posibilidad de que Osasuna reclamase su cesión de aquí al final de temporada para cubrir la baja de larga duración del central Loties, que sufre una rotura severa en el tendón de Aquiles.
Un movimiento que se produciría para apuntalar al equipo rojillo en los ocho partidos que restan para salvar a Osasuna de la quema del descenso. El apellido de Sola ha aparecido en la prensa navarra entre las opciones que barajaría el club como solución provisional en este momento de zozobra. Sin embargo, su agencia de representación asegura a esta web que, al menos de momento, no se ha producido ninguna petición formal y que aunque así fuera se antoja una operación más que compleja. Sola, al que cortejaron en el mercado invernal el Valladolid y algunos Primeras como Deportivo o Elche le sondearon, se quedó en tierra porque al final el Athletic le negó la salida. Ahora, con su situación similar aunque ilusionado por sus últimos minutos ante el Getafe, el presidente de Osasuna, Luis Sabalza, admite que estudian la posibilidad de reforzar el equipo que entrena José Manuel Mateo, aunque necesitan la aprobación de la LFP. Los problemas extradeportivos y judiciales también azotan al club navarro, al que ya perteneció Kike Sola y por el que el Athletic abonó 4 millones de euros.