El técnico de la UD Las Palmas, Quique Setién, admitió tras el 5-1 encajado en San Mamés que a sus futbolistas les faltó "lucidez y agresividad" para contrarrestar la "superioridad manifiesta" exhibida por el Athletic Club "en todos los sentidos" del juego. "A pesar de esa superioridad ha habido momentos, como el 2-1, que pudimos haber cambiado la dinámica. Pero nos han superado claramente en todas las zonas del campo. La velocidad de Williams nos hizo mucho daño y su agresividad en las disputas nos ha impedido expresarnos de la mejor manera, que es con balón", explicó.
Setién añadió que los dos goles encajados a balón parado en los primeros diez minutos trastocaron su plan inicial, que pasaba por "aguantar al principio y tratar de superar la presión" que sabía les iba a realizar el Athletic al comienzo del encuentro.
"Si a alguien hay que echarle la culpa es a mí porque en días como hoy quizás tendría que cambiar algunas cosas, pero no queríamos cambiar nuestra identidad. Los últimos tres partidos lo habíamos hecho bien, pero hoy nos faltó lucidez y agresividad", incidió.
El técnico cántabro reconoció también que la Unión Deportiva "no está en su mejor momento", aunque no cree que esté "roto", y valoró que hoy se enfrentaron a un rival que "ha hecho las cosas extraordinariamente bien" y que "se está jugando Europa".
"Posiblemente haya sido uno de los peores partidos de la temporada, pero quiero buscar disculpas. Lo que sí voy a tratar es que el equipo no desconecte aunque haya situaciones complicadas, como jugadores que no han renovado todavía o que yo haya dicho que no siga, que han afectado al equipo", concluyó.