Tras la derrota clara del Deportivo Alavés ante el Athletic Club en el campo de San Mamés por 2-0 en un derbi descafeinado que debió reflejar mayor diferencia en el marcador si no es por el acierto del meta Pachecho, el bilbaíno Ibai Gómez, enrolado en el equipo babazorro, ha lamentado este lunes que "todos los partidos tienen que servir para algo, el de ayer para saber qué tipo de equipo no debemos de ser", según ha expresado en su cuenta de Instagram.
El 11 de Santutxu, que fue cambiado por el Pitu Abelardo y se llevó una gran ovación de la Catedral, espera que "solo sea un bache en la buena dinámica que traíamos, esto no para. Mil gracias, como siempre, a toda nuestra afición por no dejar de alentarnos nunca. Y gracias también a San Mamés por el cariño que me trasmitió una vez más. ¡El glorioso nunca se rinde!", lanza el hijo de Mitxelo en la red social.