Ya es oficial. En nombre de Aymeric Laporte se ha abonado a las 14:00 horas de este lunes en la Liga de Fútbol Profesional (LFP) los 65 millones de euros de su cláusula de rescisión para fichar por el Manchester City. Una importantísma inyección económica para las arcas del Athletic Club, que dos horas después confirmaba el aserto en su web, a costa de perder a uno de los pilares básicos del proyecto rojiblanco.
Poco ha durado la alegría en Bilbao tas las renovaciones de Iñaki Williams y Kepa Arrizabalaga hasta 2025. Apenas unas horas después de cerrarse el culebrón del portero de Ondarroa con una inesperado giro de guión favorable al Athletic, el Manchester City de Pep Guardiola se lanzaba a por el central galo en una operación relámpago con un contrato por seis temporadas y una ficha que rondaría los siete millones de euros netos por campaña.
Al técnico catalán le faltan defensas, ya que cree que Mangala y Kompany se lesionan demasiado y el jugador del Cuco Ziganda es una opción que ya habían valorado seriamente en 2016. Les dio carpetazo y renovó al alza, algo que no sentó bien a los citizens. Fuentes próximas al de Agen habían apuntado el lunes de la semana pasada que "no hay nada de nada" sobre este posible asunto, pero posteriormente los acontecimientos daban un giro de 180 grados, concretándose en la salida, primero de la convocatoria ante el Eibar, y ahora ya de la propia entidad de Ibaigane un 29 de enero de 2018.
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— Athletic Club (@AthleticClub) 29 de enero de 2018