Hay futbolistas para los que el fútbol da muchas vueltas. Es el caso de Raúl Fernández-Cavada, que tras muchos avatares con cambios de equipos, categorías y lesiones, ahora ejerce felizmente como jugador de la Unión Deportiva Las Palmas.
El exguardameta del Athletic Club, tras desvincularse del Levante, con el que tenía una campaña más de contrato, fue operado a finales de enero de la cadera derecha, y emprendió a sus 30 años una nueva etapa en el equipo de Manolo Jiménez.
Tras sus pasos previos por Athletic, Mirandés, Racing, Valladolid y Numancia quería competir y disfrutar. Y a fe que lo está logrando. Nunca es tarde para gozar de tu profesión debe pensar el espigado arquero bilbaíno.
En cuatro partidos el meta vasco se ha convertido en el quinto portero que más balones detiene de LaLiga 1|2|3. Doce paradas lleva con tan solo dos goles encajados. Le llueven alabanzas, pero él sabe que su camino por el deporte profesional no ha sido sencillo.
Y es que cuando se colocaba por primera vez la camiseta de la entidad canaria sobre Raúl existía una gran duda: una operación y su larga inactividad el curso pasado. ¿En qué estado de forma iba a estar? ¿le daría para ser titular?
Afortunadamente su lesión de rodilla parece ser ya tan solo un lejano recuerdo, tras jugar todos lo partidos del curso se ha quedado fijado ya como portero titular del equipo amarillo con sus buenas actuaciones de cada semana.
El meta vizcaíno trabajó a las órdenes del 'Loco' rosarino en el Athletic Club de Bilbao durante dos temporadas, por lo que le conoce bien de primera mano. "Ya estaba preparado, vimos a un equipo que no deja de correr, que tiene muchos automatismos ya adquiridos. Funciona de un modo muy mecánico. El tema de los espacios lo cuida muy bien. Fue muy bonito volver a verle; le saludé y le deseé mucha suerte", contaba al acabar.
Eso sí, discreto el bilbaíno no quiso desvelar alguna anécdota de Bielsa en Lezama, más allá de las conocidas como la del enfrentamiento con un encargado de Balzola, jardineros, etc... "Se conocen muchas anécdotas y no deja de ser un entrenador distinto. Es alguien que te marca. Vivía el fútbol con pasión, como pocos he conocido", valoraba.