La baja segura de Markel Susaeta, expulsado el domingo en el Benito Villamarín, y la más que probable por lesión de Aritz Aduriz son los grandes quebraderos de cabeza del técnico del Athletic Club, Eduardo Bertizzo, de cara a la visita del Villarreal el miércoles a San Mamés (20.00 horas).
El eibartarra purgará un partido de sanción y obligará al de Cruz Alta a encontrar una nueva alternativa para la banda derecha del ataque.
Las opciones son varias. Una de ellas, ya utilizada por Berizzo ante el Huesca, sería dar entrada a Iñigo Córdoba en la izquierda y mover el resto de sus piezas ofensivas. El bilbaíno jugó 70 minutos ante los de Leo Franco, aunque no acabó de convencer al técnico, que le relegó fuera de la convocatoria en los dos siguientes encuentros.
Otra posibilidad, inédita hasta ahora, sería adelantar la posición de Oscar de Marcos y ubicar a Ander Capa en el lateral derecho, con Raúl García en la otra banda y Williams como referencia.
Lo que sí es seguro, más en San Mamés, es que Berizzo regresará a su habitual dibujo 1-4-3-3. Javi Calleja dispone habitualmente un 1-4-4-2 que no hace necesaria la variante táctica introducida en Sevilla -con éxito hasta la expulsión de Susaeta- con dos puntas y el doble lateral zurdo Balenziaga-Yuri. También se antoja más que probable la vuelta al once de Iker Muniain, que ya jugó los últimos minutos ante los béticos.
A la espera de la evolución de Aduriz, que el lunes entrenó al margen del grupo por esa sobrecarga muscular que le impidió viajar a Sevilla, las únicas bajas seguras, además de Susaeta, son las de Iago Herrerín e Iñigo Lekue.
El once probable del Athletic frente al Submarino Amarillo, por lo tanto, podría ser el formado por Unai Simón; De Marcos, Yeray, Iñigo Martínez, Yuri; Dani García, Beñat, Muniain; Raúl García, Williams y Córdoba.