Corría el minuto 68 de partido en Ipurua y Berizzo decidió introducir su primer cambio. Mikel San Jose ingresaba en el terreno de juego en sustitución de Iker Muniain, que tuvo escaso protagonismo en un partido donde el juego raso escaseó.
"Muni" le dio su brazalete de capitán a San Jose y al acercarse al vestuario tuvo un gesto feo con un miembro del cuerpo técnico. Fruto de la frustración, Muniain despreció, un botellín de agua que le ofreció Juanma Ipiña, fisioterapeuta desde hace décadas del club. Josean Lekue presenció también la escena que captaban así las cámaras.
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Sin embargo, segundos después, las cámaras de televisión también captaron y emitieron la rectificación inmediata del navarro. Iker le tendió la mano a Ipiña, en un claro gesto arrepentido buscando la complicidad y el perdón del "fisio". Además, se agachó para recoger la botella que el mismo había tirado de malas formas.
Con el boss @IkerMuniain10 no se mete nadie, estamos? #AthleticClub @AthleticClub pic.twitter.com/AOYNofpGYP
— J. S. H. (@JonSinhache) October 22, 2018
No fue el día de Muniain, pero ningún león estuvo entonado en una tarde de poco fútbol en Ipurua. El de "La Txantrea", que volverá a ser padre por segunda vez en fechas muy próximas, es una pieza fundamental para el equipo y su madurez en los últimos años es evidente. El de ayer fue un gesto que lo ejemplifica. Rectificar, es de sabios.