Iker Muniain, mediapunta del Athletic Club,lamentó el empate cosechado en Vallecas frente al Rayo, que los deja al borde del descenso, y apuntó que el vestuario está "a muerte" con el técnico argentino Eduardo Berizzo, cuestionado por los resultados.
"La primera parte ha sido mala y en el descanso sabíamos que había que corregir cosas, por eso vimos un equipo totalmente diferente y se pueden rescatar cosas para buscar otro día esos tres puntos", comentó.
Muniain reconoció que su equipo "no entró bien" al partido y el Rayo les "sobrepasó con más ritmo y perdieron los duelos individuales"."Hay que reconocer que la situación no es la que deseábamos, queremos pelear por los puestos de arriba y queda un mundo", confesó Muniain, que no es partidario de empezar a calificar los siguientes partidos de finales.
"La situación es delicada, pero no creo que en la jornada diez haya finales. El Athletic es un club serio para estas cosas, cree en los proyectos, en los entrenadores y nosotros estamos a muerte con el entrenador. Creemos en su idea y vamos a por los tres puntos", concluyó el navarro.
Su renovación está pendiente aún. Habrá elecciones el próximo mes de marzo y el atacante zurigorri dijo que "espero que pronto haya buenas noticias" al respecto.