El Athletic Club está echando en falta esta temporada los goles, una referencia, la efectividad de Aritz Aduriz... El equipo que dirige Eduardo Berizzo ha conseguido marcar 13 goles en este mal arranque de temporada. Hay dos jugadores que comparten el pichichi entre los rojiblancos. Se trata de Iker Muniain y Williams. Los dos llevan cuatro tantos cada uno. Más de la mitad del bagaje total de los zurigorris. El caso es que los goles en ningún caso llegan desde el banquillo.
Esta temporada, ningún jugador suplente ha conseguido marcar cuando ha ingresado en el terreno de juego. No hay revulsivos, o al menos no están teniendo fortuna de cara a gol. Capa, Córdoba, Guruzeta...entre otros, están llamados a dar un poco de chispa en las segundas mitades, pero desde luego, no están contando con las oportunidades necesarias para poder sumar goles.
El dato al que apunta Adurizpedia, indica que el último tanto marcado por un león desde el banquillo fue el de Iker Muniain en Villareal. Los de Ziganda se impusieron por 1-3 al Villareal el día que el de la Txantrea reaparecía tras su segunda grave lesión. Lo que es indudable es que Muniain es un fijo para Berizzo y que desde luego no puede llevar la vitola de revulsivo.
El Athletic necesita esta inyección de verticalidad, recursos ofensivos...jugadores que puedan dar un plus al ataque del equipo. Eso no está ocurriendo. Al menos los jugadores de banquillo de los últimos tiempos han sido incapaces de perforar la meta contraria. Los datos ahí están.
Desde el partido de Formentera, hace ya más de un año, el #AthleticClub ha disputado 49 partidos oficiales.
En ese periodo sólo UNO de los 56 goles del equipo lo ha marcado un jugador saliendo desde el banquillo. 😳
Fue Muniain en Villarreal (1-3), el día de su reaparición. pic.twitter.com/q9GxANwcIi
— Adurizpedia™️ (@DatAthle) November 19, 2018