Tras las vacas gordas llegan las flacas, es la ley del fútbol. Gaizka Garitano vive su peor momento desde que hace menos de un año aceptase la responsabilidad de dirigir al Athletic Club. Lo cogió, tras el cese de Eduardo Berizzo, descolgado en la tabla, en puestos de descenso y seriamente amenazado con perder la máxima categoría de la que el equipo bilbaíno no ha bajado nunca.
Tras sacar a los 'leones' del atolladero, hacerles pelear por Europa y hasta colocarles líderes en el arranque de esta temporada, cinco partidos sin ganar han sumido en la decepción a una afición rojiblanca también crítica con el juego que propone el de Derio.
Ese mal momento de Garitano se pueden resumir en cinco datos:
El Athletic de Garitano se aupó al liderato en la quinta jornada como consecuencia de un espléndido arranque en San Mamés, ganando al Barcelona, la Real Sociedad y el Alavés, y cierta solidez a domicilio con empates en Getafe y Mallorca, que le dieron 11 puntos de 15 posibles.
Desde entonces, todo lo contrario, dos puntos en cinco encuentros, derrotas ante el Valencia en San Mamés, en Balaídos y en el Wanda Metropolitano, y empates en Leganés y contra el Valladolid en casa.
Que el Athletic tiene un problema de gol es una queja habitual de Garitano, que veía como los suyos rentabilizaban los pocos que marcaban y ahora contempla lo contrario: el daño que le hacen los todavía no muchos que recibe. En las cinco últimas citas ha recibido seis goles, pero solo ha marcado dos.
En lo que va de curso, en diez jornadas, el Athletic solo ha logrado ocho. Solo más que los dos últimos, RCD Espanyol (5) y CD Leganés (5), el equipo que marca la salvación, el Celta (5), y el decimoquinto, el RCD Mallorca (7). Por contra, con 7, es el segundo menos goleado tras el Atlético (5).
El Athletic siempre pierde cuando recibe el primer gol. No ha llegado ni ha empatar cuando el rival ha abierto el marcador. Lo que ocurrió ante el Valencia CF en La Catedral (0-1) el Celta en Vigo (1-0) y el Atlético de Madrid en el Metropolitano (2-0). Las victorias bilbaínas fueron sin goles en contra, Barcelona (1-0), Real Sociedad (2-0) y Deportivo Alavés (2-0); y los empates con goles, en Getafe, Leganés y contra el Real Valladolid en Bilbao, todos a uno, tras adelantarse siempre en el marcador los de Garitano. En Mallorca la igualada fue sin goles.
La mala racha en la que se encuentra le ha costado al Athletic nueve puestos en la tabla en cinco jornadas. Tras la quinta era líder, con 11 puntos, y ahora es décimo con 13. Lo peor es que tiene ya más cerca el descenso, que se le ha acercado a cuatro puntos, que Europa, que ahora le queda a cinco, las posiciones de Liga Europa, y seis, las de Liga de Campeones.
A pesar de la mala racha, que puede ser coyuntural, y del reconocimiento de Garitano de que a su equipo le cuesta hacer gol, una reflexión de mucho calado, su apuesta ofensiva sigue siendo la misma, con Raúl García e Iñaki Williams en los puestos más adelantados e Iker Muniain escorado en una banda.
La propuesta da lugar a debates en el Bilbao futbolístico, en los que muchos piden que el técnico pruebe con Raúl García en la punta de ataque con Williams en una banda y Muniain en la media punta. Otros, menos, simplemente que Raúl y Muniain cambien sus posiciones, trasladándose Raúl a la banda y Muniain detrás de Williams.
Hay quien incluso demanda ya la titularidad del joven talento navarro del filial Oihan Sancet. Lo que añadiría aún más complejidad al asunto, ya que, como Raúl y Muniain, el puesto del también navarro es de media punta.