Aún es pronto, puesto que apenas han pasado 12 jornadas de LaLiga Santander, pero resulta imposible no preguntarse si al Athletic Club le ha llegado el momento de atreverse. De atreverse a apostar definitivamente por los jóvenes dando salida a algunos veteranos de la plantilla, con todas las consecuencias que pueda acarrear este hecho.
Oihan Sancet y Unai Vencedor están demostrando en el filial que tienen ese algo diferente que puede ser determinante para marcar diferencias en la élite. Más allá de su rendimiento, ofrecen esos detalles que ayudan a pensar que podrían estar listos y ser de esa pasta necesaria para dar el salto al primer equipo y no desentonar.
San José y Beñat acaban contrato el próximo verano y quizá sea el momento de decirles adiós. Son dos buenos futbolistas, aunque se les nota algo quemados, incapaces de alcanzar su mejor versión y con cierta necesidad de un cambio de aires.
Puede que este sea el momento de dejarles marchar y que los jóvenes ocupen su lugar. Pero no para tenerles en el banquillo y darles entrada en momentos contados, sino hacer que jueguen minutos de calidad junto a los Córdoba, Larrazabal, Villalibre y demás. Solo es una cuestión de valentía, de apostar por el producto de tu cantera para dotar de aire fresco al equipo.