Es un hecho que la desescalada va a todo trapo. Las cifras positivas que arroja la evolución de la pandemia del coronavirus permite a LaLiga Santander hacer previsiones sobre cuándo podrán volver los espectadores a los estadios de fútbol antes de que concluya el 2020. Esa desescalada tendrá sus primeros efectos a partir del comienzo de la próxima temporada. Una estimación que podría servir también para celebrarse la final de la Copa del Rey entre el Athletic Club y la Real Sociedad sin esperar al cambio de año.
La idea que maneja Javier Tebas es que el 12 de septiembre, fecha prevista para el comienzo de la próxima campaña, la presencia de aficionados en las gradas de los estadios sea del 30% del aforo. Si todo continúa sin sobresaltos, esta cifra se incrementaría en noviembre hasta el 50% del aforo. Y la situación esperada por todo, es decir, el 100% de la capacidad, se dejaría para enero de 2021.
Tanto los donostiarras como el Athletic ya dejaron clara su postura de esperar lo que fuera necesario para disputar la final de la Copa del Rey. Pero siempre que así pudieran acudir los aficionados a las gradas de La Cartuja, escenario donde se disputará este derbi vasco con un título es juego. Por lo que a partir del primer mes del año que viene esta final se podría celebrar ya en cualquier momento.
Un partido para el que el consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda, tiene previsto hacer "pedagogía" tanto en la afición txuri urdin como en la rojiblanca acerca de los pitos al himno: "No dude usted que trataré de hacer pedagogía y transmitiré a esas fantásticas aficiones que respeten los símbolos nacionales que a todos nos representan", dijo Imbroda la semana pasada en respuesta a la pregunta de un diputado de Ciudadanos en el Parlamento Andaluz.