Libro Verde 2020-30, el Athletic que queremos (II): Lezama

Athletic Club 2020–2030: El Libro Verde – El Athletic que queremos

2ª Parte: Lezama

Lezama no puede estar en el ojo del huracán con cada nueva directiva entrante. Cambios de calado en su estructura deben estar muy justificados ya que si no lo están en muchas ocasiones se producen efectos diferentes a los deseados. La Interrupción de la metodología de trabajo corta y confunde a los chavales de la cantera y además, como se está viendo, provocan comentarios de “amiguismo” a la hora de las nuevas contrataciones. Ambos aspectos no son positivos por lo que debemos buscar la forma de conseguir una continuidad metodológica pero no exenta de cambios cuando se precise si los resultados no son claramente los planteados. Pero estos cambios deben hacerse con luz y taquígrafos para evitar descontentos, en el Athletic debemos remar todos en la misma dirección.

Probablemente sea interesante crear una comisión de evaluación de Lezama compuesta por socios, directivos y técnicos de clubs contrastados de clubes de futbol de Euskadi y que se reúna anualmente para tomar decisiones sobre la gestión del director técnico.

Formación. El Athletic debería tener personal estudiando las diferentes escuelas de entrenamiento del mundo para estar al día en nuevos métodos e ideas que puedan surgir así como poder evaluar y localizar entrenadores foráneos para nuestro Club. Ya sea para el fútbol base como para la primera plantilla.

Como hemos dicho al principio debemos tener a los mejores en todos los campos y estamos obligados a descubrir a los mejores talentos en edades tempranas con el fin de abaratar su contratación.

Cuando el FC Barcelona se planteó sustituir a Frank Rijkaard como responsable del banquillo Joan Laporta acudió a Cruyff en busca de consejo. La junta directiva estaba por la contratación de José Mourinho pero Johan Cruyff se mostró tajante. “Ya tenemos entrenador, el del filial, Guardiola es nuestro Míster”. El Barcelona podía contratar a cualquier entrenador del mundo sin embargo la visión de Cruyff le llevó a apostar por un joven talento que no había demostrado nada en el futbol profesional y acertó. El cuerpo técnico del Athletic debería ser capaz de captar estas figuras en potencia para no tener que tirar de talonario.

Los chavales de la cantera deben disponer de los mejores medios para perfeccionar sus condiciones naturales. Quizá habría que pensar en que jugadores que ya no estén en activo, o por qué no, incluso que estén en la primera plantilla puedan dedicar un tiempo a la semana a enseñarles los fundamentos de cada especialidad. Aduriz podría dedicar una hora a la semana a enseñar a saltar a cabeza, calcular el tempo… de los chavales, quizá Muniain podría explicarles como girarse con rapidez, Goiko como entrar al remate en los córners…

El centro, el disparo a puerta desde fuera del área y el remate de cabeza deberían ser suertes que todo jugador debería saber manejar con maestría y son aspectos que se pueden y deben aprender antes de llegar a profesionales. El Athletic tiene una ventaja sobre las canteras de otros equipos y es que puede tener paciencia y enseñar poco a poco debido a que dispone de tiempo al no dar tantas altas y bajas como otros clubes que incorporan constantemente jugadores jóvenes de cualquier parte del mundo. Esto puede incidir en una mejor educación futbolística.

Eso nos llevaría a otra cuestión. El tiempo que los jugadores dedican a formarse. Sería conveniente estudiar la efectividad de dedicar un tiempo extra al actual a cuestiones de técnica individual: remate de cabeza, giros rápidos, disparo a puerta, centros, finalización de jugadas, etc... Entrenamientos que no requieren mucho desgaste físico pero absolutamente necesarios hoy en día para poder competir. Estamos hablando de todas las categorías y son muy importantes en las primeras etapas de entrenamiento.

Históricamente el Athletic ha tenido dificultades para encontrar y formar jugadores estilo Iker Muniain con desborde, regate y dificultades para incorporar jugadores de toque que busquen paredes y combinaciones,... Sin embargo son jugadores que todas las plantillas deberían tener. ¿Quizá se pierden por el camino por no encontrar compañeros que jueguen a lo mismo?

Quizá entonces el Athletic debería montar un tercer equipo de “jugones”, juntar los mejores jugadores técnicos y que practiquen ese futbol que en Lezama no pueden. Quizá así salgan algunos aprovechables para que acaben entrando en el primer equipo

Equipos inferiores del Athletic

Posiblemente lo ideal sea tener una primera plantilla corta de forma que todos los componentes estén implicados evitando el malestar que se suele producir en los jugadores que no juegan con asiduidad y poder “tirar” del segundo equipo en cualquier momento. Para ello este debe estar acostumbrado a competir con el ritmo y exigencia de LaLiga Santander para lo que lo ideal sería que el segundo equipo militara en segunda división.

A riesgo de retrasar alguna evolución la mejor sería cambiar completamente de mentalidad y fichar jugadores jóvenes de mucha calidad de otras canteras que quieran que se fogueen en la división de plata o fichar jugadores contrastados de otras latitudes para las demarcaciones en las que no tengamos jugadores competentes en cada momento.

Si queremos luchar por LaLiga no podemos subir a chavales a ver qué pasa, sino que tenemos que poder tirar de ellos en todo momento. Incluso es posible que hubiera que redactar una letra pequeña por la que el entrenador del primer equipo, sea el que sea, esté obligado a hacer debutar y jugar un número determinado de minutos a jugadores del filial a lo largo de la temporada.

El Athletic no puede permitirse casos como el de Gaizka Garitano que brinda pocas oportunidades y normalmente en minutos de la “basura” como se dice en el basket. Ya nos ha pasado anteriormente con otros entrenadores y no podemos consentirlo.

Posiblemente esto obligue a intentar subir el Basconia de tercera a 2ªB para que los pasos sean menores y para ello por supuesto tendremos que volver a tirar de fichajes con jugadores más experimentados o de jóvenes de calidad de otros equipos para cubrir posiciones.

3ª Parte: Entrenadores

Debemos tener los mejores entrenadores del mundo y si no podemos pagarlos habrá que ficharlos antes de que despunten. Xavi Hernández en una entrevista comentaba la llegada al club de Eric Abidal y como este con el paso del tiempo fue mejorando en todas las parcelas del juego gracias al trabajo que Guardiola hizo con él.

Para encontrar un buen entrenador no hay que mirar los resultados que obtiene su equipo ya que si dispones de los mejores jugadores obtendrás buenos resultados sino de si la mayoría de los jugadores a su cargo han mejorado su juego desde su llegada. Analizando sus jugadores y su desarrollo sabremos qué tipo de entrenador es.

Los entrenadores del Athletic deben ser siempre jugadores de medio campo o delanteros, es imposible enseñar a jugar a los chavales si tú no has sabido hacerlo. Te ha podido faltar físico y por eso no has llegado a jugar en Primera división pero quizá seas un gran entrenador. Entrenadores que de jugadores se limitaban a “destruir” el juego enemigo poco pueden aportar y enseñar a los jugadores a su cargo. ¿Cómo van a enseñar las bases del juego si él las desconoce?

Thierry Henry explicaba que había muchos partidos que llegaban a su final y este se extrañaba de lo poco que había durado porque disfrutaba mucho con el juego, ¡se divertía! Es otro aspecto importante a la hora de entrenar y por tanto de fichar a un entrenador. Los jugadores deben saber a qué juegan, creer en el entrenador y divertirse haciendo lo que se les pide. Se trabaja más y mejor cuando uno se divierte.

Debemos buscar ideas diferentes, tenemos que buscar la excelencia y eso no se consigue sin nuevas ideas, quizá habrá que arriesgar o abrir la mentalidad a otros estilos de juego sin abandonar el nuestro para incorporar más creatividad al conjunto.